Después de dos jornadas de trabajo de campo y sobre plano, conversación, debates grupales y puesta en común de las conclusiones, las personas asistentes al proceso participativo sobre el diseño futuro de la parcela de Cabo Pedro coincidieron en la necesidad de un parque urbano para el barrio, con zona de estacionamiento en las inmediaciones. En la actualidad, los usos se limitan al aparcamiento y al paseo de perros, y las condiciones del terreno son de extrema suciedad y abandono.
Los vecinos y vecinas plantearon diversas posibilidades, desde la construcción de un espacio subterráneo para los coches, aprovechando el desnivel de la parcela, a la habilitación de suelo alternativo. Y una vez garantizado el aparcamiento, la imaginación se disparó en propuestas de lo más diversas, con la mirada puesta en la restauración del molino y la mareta aledaña, aún en manos privadas, y el mantenimiento de la pared de escalada de la pedrera, como hitos de la intervención y referencias de arraigo para la población del barrio.
Además, zonas de juego infantil, recinto para mascotas, un kiosco, zona perimetral para la práctica deportiva, un estanque, fuentes de agua potable, habilitación de las veredas que ya se usan de manera habitual, plantación de vegetación endémica y árboles de porte en el aparcamiento subterráneo, que asomen sus frondas a través de huecos abiertos en superficie, entre otras.
El consejero de la Reserva de la Biosfera, Samuel Martín, presente en ambas jornadas, se refirió a la filosofía y objetivos del programa Arrecife, capital de la Biosfera, con el que se pretende incorporar criterios de sostenibilidad, generación de zonas verdes y gestión responsable de los recursos a la trama urbana.
Las propuestas irán al Colegio de Arquitectos
En esta línea, animó a las personas que acudieron a aportar su granito de arena a “que no piensen solo en la necesidad de aparcamiento, sino que propongan usos que cualifiquen el barrio y mejoren la calidad de vida. Valoren, por ejemplo, la peatonalización de la calle Molino, que puede actuar como vía de conexión del parque con el Charco; no se limiten a pensar en el morro de Cabo Pedro; sus alrededores pueden ser también objeto de intervención y mejora”, recordó.
Todas las propuestas, junto a las que se recaben a través de un cuestionario sobre los usos actuales y posibles de la parcela propiedad del Cabildo, difundido las pasadas semanas, se pasarán al Colegio de Arquitectos, que articulará toda esa información en el pliego de un concurso de ideas, para el diseño del futuro espacio público del barrio de La Vega, en la capital de Lanzarote.