Una pequeña casita blanca con las ventanas y puertas azules es el único pedazo de historia local que permanece en el último rincón edificado de Playa Blanca (Yaiza), justo antes de adentrarse a pie en las playas de Papagayo, en el Monumento Natural de Los Ajaches. Localizada en la conocida como playa El Afre, que se extiende a lo largo de algo menos de medio kilómetro de riscos y arena negra, esta casa sobrevive desde hace más de cien años en una zona famosa por su especulación urbanística y por haber albergado el pedazo de litoral con más hoteles ilegales de España.
Juan Antonio Morales es uno de los herederos de esta pequeña casita, que aún pertenece a su madre y donde murió su padre. La vivienda costera está situada junto al hotel ilegal Sandos Papagayo (anteriormente conocido como Papagayo Arena). Desde mediados de noviembre, la propiedad del hotel está abriendo un camino justo detrás de la vivienda y ha obligado a Juan Antonio Morales a recordar mediados de los años noventa cuando los propietarios del complejo hotelero comenzaron a picar el risco virgen que custodiaba su casa y donde pastaban las cabras y las gallinas de sus padres.
"Lo único que pido es que me dejen la casita tal cual", expone Juan Antonio Morales durante una conversación con La Voz. Este ciudadano explica que desde que comenzaron las obras le entró el temor de que se pudiera dañar la estructura de la vivienda. "En aquel tiempo se hacían las casas con poca cosa, cuatro piedras, y ahora con la máquina esa grande, con el monstruo ese picando, todo el día 'pica pica'", se queja este vecino del retumbar de la máquina desde las 10.00 horas de la mañana hasta las 18.00 horas de la tarde. Aunque asegura que hace unos días acabaron de picar el risco que estaba detrás de su vivienda.
Fuentes del Ayuntamiento de Yaiza han explicado a La Voz que estas obras se enmarcan en la creación de dos viales de acceso a la playa de Las Coloradas (o playa El Afre) que la Dirección General de Costas del Gobierno de Canarias autorizó realizar a la propiedad del hotel, en contra del criterio de la Dirección de Costas del Gobierno de España, que había emitido un informe desfavorable. Al mismo tiempo, el consistorio expone que la construcción de esos accesos no supondrían la legalización del hotel y que la propiedad está pendiente de presentar otro proyecto de legalización.
Aquel risco virgen que aún Juan Antonio Morales recuerda fue sustituido por un gran hotel, con una licencia de construcción anulada por la justicia y declarado ilegalizable. El alojamiento hotelero excede la altura máxima permitida, tiene más plantas de lo legal y se construyó ocupando un vial de acceso público a una playa. A ello se suma que la práctica totalidad del hotel está dentro de la servidumbre de protección declarada por la Dirección General de la Costa y el Mar.
"Lloré como un niño", recuerda este vecino de Yaiza los trabajos para construir el hotel hace casi treinta años. "Yo ya estoy resignado, al principio lloraba de impotencia al ver los camiones y el polvo. Ahora, lo que está hecho, eso no lo va a tirar nadie", expone. Las nuevas obras en la vivienda familiar le recordaron cómo acabaron con el risco virgen: "Cuando el otro día vi la máquina, me vino todo el pasado".
Un hotel ilegal abierto al público durante décadas
El polémico Sandos Papagayo es uno de los 22 hoteles que vieron declaradas nulas sus licencias en Lanzarote y uno de los tres que no han podido legalizar aún su situación. En concreto, su licencia fue declarada nula por la Justicia en 2007 por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias por cometer infracciones urbanísticas graves. Luego, en 2016 fue declarada delictiva por la Audiencia Provincial de Las Palmas, que condenó al entonces alcalde de Yaiza José Francisco Reyes a seis años de cárcel e inhabilitación y decretó el embargo de todos sus bienes.
El alcalde de Yaiza José Francisco Reyes fue condenado por los delitos de prevaricación urbanística, prevaricación administrativa, blanqueo de capitales, actividades y negociaciones prohibidas a funcionarios, cohecho y malversación de caudales públicos. La Audiencia Provincial expuso entonces que Reyes "alteró la la realidad urbanística del municipio" y que había dado carta blanca a la construcción de hoteles "sin otra base legal que su capricho", llegando a autorizar hasta siete establecimientos (alrededor de 1.500 plazas turísticas) en un mismo día.
A ello se suma, un fallo judicial de enero de 2022 del Juzgado de lo Contecioso-Administrativo número 5 de Las Palmas, que entró al fondo del asunto y ordenó la ejecución íntegra de una de las tres sentencias que resaltaron las ilegalidades del hotel Sandos Papagayos. Entre ellas, expuso que la construcción ocupaba 6.500 metros cuadrados de acceso público, porque se construyó unificando dos parcelas y haciendo desaparecer la carretera pública que estaba entre ambas.
Durante todos estos años, el establecimiento ha seguido abierto al público y alojando turistas a pesar de no contar con ninguna autorización para ello. A ello se suma que tiene una orden de demolición dictada por el Ayuntamiento de Yaiza en marzo de 2016, durante la alcaldía de Gladys Acuña.
El propio consistorio sureño concluyó que este establecimiento, localizado en una ubicación privilegiada junto al Monumento Natural de Los Ajaches, era ilegalizable.
El anterior grupo del Gobierno del Cabildo de Lanzarote ya denunció ante los tribunales los intentos para modificar la normativa urbanística y lograr la legalización de este hotel.
Asimismo, Ecologistas en Acción clasifició el Sandos Papagayo como "uno de los mayores símbolos de la corrupción en Lanzarote", después de que el grupo de Gobierno Cabildo de Lanzarote, dirigido por Coalición Canaria y el Partido Popular, aprobara la autorización turística del hotel en pleno verano de 2024.
