"Recibí un baño de humildad que revierto cada día en mis propias pacientes que, más vulnerables que yo misma entonces, buscan mi ayuda y consuelo en sus partos", añade
Ana Nácher, coordinadora insular, resalta “la necesidad de que se facilite la contratación de más personal en los servicios sociales municipales para que las ayudas lleguen a todo el mundo”.