El sicario colombiano detenido el pasado fin de semana en Argana Alta, Jesús Alejandro Ramírez Valencia, autor de 13 homicidios en su país, ordenó asesinatos en Colombia mientras vivía en Lanzarote, como así señala el diario La Provincia.
En su país lo consideran autor de al menos 13 homicidios y asesinatos. En unos actuó presuntamente como el ejecutor y en otros supuestamente ordenó las muertes. De hecho, una vez asentado en Canarias ordenó varias de esas ejecuciones, una de ellas en el verano de 2021.
Ramírez Valencia tiene la condición de lo que en Colombia se llama un "determinador", es decir, quien ordena a ejecutar a personas que obstaculizan o estorban a su organización delictiva.
A los investigadores de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) de Santa Cruz de Tenerife les consta que el sicario entró en España, procedente de Panamá, en septiembre de 2019. Fue la única vez en todo este tiempo en que utilizó su pasaporte, y trató de evitar cualquier trámite en una administración que delatara su lugar de residencia.
Las primeras gestiones de la Policía Nacional les permitieron saber que tenía un domicilio en el Valle de San Lorenzo, en Arona (Tenerife), pero cuando trataron de localizarlo no obutuvieron los resultados positivos. Consiguieron saber posteriormente que se había trasladado a Lanzarote, donde fue detenido el pasado fin de semana.
Ramírez Valencia era consciente del interés de las autoridades de su país por atraparlo. Y, por ese motivo, llevaba una vida muy discreta, hasta tal punto que apenas salía de su vivienda. Su grado de aislamiento era tal que tiene un hijo de corta edad en Tenerife, al que no visitaba nunca, con el objetivo de no ser arrestado o localizado en sus desplazamiento.
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