TÚ TAMBIÉN HACES LA VOZ

Denuncia que un coche "a gran velocidad" atropelló a su perro en Órzola y lo abandonó "agonizando en la carretera"

"Un perro es un ser vivo y tiene tanto derecho a la vida como cualquier ser humano, y si por desgracia te ocurre un desafortunado percance, auxílialo", reclama la dueña de Jack

3 de junio de 2019 (21:16 CET)
Denuncia que un coche a gran velocidad atropelló a su perro en Órzola y lo abandonó agonizando en la carretera
Denuncia que un coche a gran velocidad atropelló a su perro en Órzola y lo abandonó agonizando en la carretera

Una vecina se ha puesto en contacto con La Voz para hacer pública su tristeza y su indignación por el atropello de su perro, que fue arrollado en Órzola por un vehículo que circulaba "a gran velocidad" y que después se marchó del lugar dejando al animal "agonizando en la carretera". Ésta es su carta:

"Esa mañana me despertó con un beso y se acurrucó en mi pecho, inocente de él, le quedaba menos de una hora de vida.

Jack no era mi perro, era nuestro hijo. Mi marido, Jack y yo formábamos una familia, compartíamos viajes, excursiones, fue un perro muy feliz, siempre juntos.

Te arrebataron la vida ese domingo 26 de mayo. No eran ni las 8,30 de la mañana. Lo saqué en las salinas al lado de casa, y en unos segundos desapareció de mi lado.

Cogí el coche y fui a buscarlo. No habían pasado ni diez minutos cuando te encontré en brazos de Jaime. Pensé que te estaba dando cariño cuando me dijo que te habían atropellado. Enloquecí. Un coche a gran velocidad te atropello. Según los testigos, imposible no haberlo visto. Si conocen Órzola, la calle principal que llega al muelle es una calle ancha con mucha visibilidad. Si no ves  a un perro blanco en una carretera negra es porque no estabas haciendo las cosas bien. Lo peor es que ni tan siquiera paró, lo dejo agonizando en la carretera. 

Todavía seguía vivo Gracias Jaime por recogerlo del asfalto. Murió en nuestros brazos Desde entonces mi vida es una tristeza y dolor constante. Yo amaba a Jack, nunca más voy a ver esa carita que me miraba con tanto amor.

Todo este escrito es una reflexión para todas aquellas personas que no cumplen los límites de velocidad. Un perro es un ser vivo y tiene tanto derecho a la vida como cualquier ser humano, y si por desgracia te ocurre un desafortunado percance, auxílialo. 

A mi querido y amado Jack, siempre en nuestros corazones".

LO MAS LEÍDO