Los pequeños viticultores de Lanzarote están muy preocupados por "la tardanza" de las analíticas del vino que se realizan en el laboratorio del Cabildo de Lanzarote. En una reciente entrevista este martes en Radio Lanzarote-Onda Cero el gerente de 'Lanzarote Natural' Daniel Lasso, ha denunciado "el mal funcionamiento" del laboratorio.
"Dejamos el vino el día 8 de septiembre y todavía estamos esperando", reconoce el empresario. "Entiendo que un análisis pueda tardar uno o dos días, pero no diez", apunta muy molesto el gerente. Razón por la que se ven "obligados a denunciar públicamente que el laboratorio del Cabildo de Lanzarote no está funcionando correctamente", añade.
"Dejamos el vino el día 8 de septiembre y todavía estamos esperando"
Según remarca Lasso "todos los años pasa lo mismo, siempre es igual". Es más, reconoce que "ya lleva pasando cuatro o cinco años y nadie hace nada". Una situación que les hace tomar la medida de "mandar la muestra de vino a Tenerife para que puedan analizarla", añade el gerente. Un "plan B" que tiene que ser financiado de su propio bolsillo: "Tengo que pagarlo yo por mi cuenta", además de "estar pagando a un laboratorio del Cabildo que no funciona bien", explica Lasso muy indignado.
Una situación que complica la venta del vino teniendo en cuenta que "a los diez días ya no vale la analítica", recalca. "La muestra de vino que se manda hoy, mañana ya es diferente", deja claro. "El vino está vivo y más cuando acaba de terminar de fermentar", lo que significa que "para corregir los defectos que tenga, necesitamos los resultados de la analítica casi corriendo".
"Para corregir los defectos que tenga, necesitamos los resultados de la analítica casi corriendo"
Una complicación que desearían no estar viviendo, pero que a 'Lanzarote Natural' no le queda más remedio que soportar, ya que siendo una bodega pequeña, "no tenemos una propia bodega, ni tecnología para analizar el vino", puntualiza el hombre. Un panorama en el que "a los pequeños viticultores se nos da un poquito de lado", asegura enfadado.
Como alternativa para solucionar el problema, lanza un mensaje al Cabildo de Lanzarote para que "ponga más personal" y el laboratorio comience a "funcionar para nosotros", concluye.
