Una vecina que vive en los esqueletos de hormigón inacabados de Villas Camelot, en la localidad turística de Playa Blanca (Yaiza), ha interpuesto una denuncia contra la empresa de desocupación Lanzaokupa por presuntamente vandalizar su coche con la palabra "sapo" (que significa chivato en Latinoamérica) y pincharle las ruedas.
Según cuenta la denunciante, este vandalismo contra su coche cree que ha sido por contar a la prensa la situación que están viviendo con esta empresa de desocupación.
En la denuncia a la que ha tenido acceso La Voz, presentada este jueves en el Juzgado de Instrucción Nº 2 de Arrecife, se recoge que la noche de este pasado miércoles "trabajadores de Lanzaokupa pintaron con spray la palabra sapo en el coche y pincharon dos de las ruedas".
En concreto, hace responsable a esta empresa porque "una creadora de contenido que les acompaña publicó un vídeo con la matrícula del coche en sus redes sociales".
En estas villas inacabadas malviven doce familias ante la grave situación para encontrar una vivienda de alquiler asequible en Lanzarote. Estos vecinos ya han interpuesto más de una decena de denuncias ante la Guardia Civil por las prácticas de los trabajadores de Lanzaokupa. Las amenazas y golpes contra estos vecinos se han vuelto comunes en la forma de trabajar de esta empresa para instigar a que abandonen este esqueleto turístico.
Además, estos vecinos también han denunciado que dos trabajadores de Lanzaokupa rajaron unas piscinas de plástico que había comprado y que utilizaba para almacenar agua potable.
Quejas de otros vecinos cercanos a este esqueleto
Una de las vecinas que vive en una casa cercana a estas villas inacabadas ha contado a La Voz las molestias por el ruido y la inseguridad que sienten por las actuaciones de Lanzaokupa. "Es horrible lo que hacen porque tiran petardos por la noche, hablan por megáfonos y uno tiene que trabajar al día siguiente y no podemos dormir", manifiesta.
Esta vecina, que tiene un hijo de tres años, denuncia que "el niño vive con miedo porque el ruido de los petardos retumba en las ventanas". Asimismo, señala que estos trabajadores "hacen fogatas" y el humo entra en las casas.
"Están abusando de la gente, no respetan el sueño de nadie... en la zona hay muchas viviendas turísticas y los clientes se están quejando de esta situación", concluye.
