La conductora del vehículo siniestrado el pasado sábado día 9 por la noche en el que falleció un joven guardia civil de 30 años, dio positivo en el control de alcoholemia, con más del triple de la tasa de alcohol permitida. En el coche, que se salió de la calzada y chocó contra una palmera, viajaban tres personas más.
Como consecuencia del accidente falleció uno de los ocupantes y los otros tres ingresaron en el Hospital José Molina. A la joven que viajaba en el asiento del copiloto se le ha extirpado el bazo y el otro ocupante tiene lesiones en las piernas. A la conductora se le dio el alta hospitalaria aunque se encuentra en estado de shock, según las fuentes consultadas por ACN Press.
El fallecido era agente de la Guardia Civil destinado en Lanzarote y estaba celebrando su traslado a Gran Canaria. Tanto la conductora como el otro ocupante también son agentes de la Guardia Civil destinados en Lanzarote.
El accidente se produjo el pasado sábado día 9 por la noche en la LZ-2. Los ocupantes del vehículo volvían de Arrecife y el coche se salió de la calzada en la entrada de El Cable chocando contra una palmera. El fallecido viajaba en el asiento trasero junto a otro compañero y no llevaban puesto el cinturón de seguridad.
ACN Press