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Agentes de la Policía Local de San Bartolomé, que se encontraban de vigilancia en Playa Honda el pasado 29 de enero, recibieron una llamada de la Guardia Civil para personarse en la calle Chimidas 16, apartamento 7, porque había un individuo bastante alterado y destrozando el interior de la vivienda.
Según informan fuentes policiales, compañeros de piso de R.G.C. pidieron auxilio policial porque un compañero se encontraba en la vivienda destrozándolo todo.
Los agentes accedieron entonces a la vivienda, encontrando a R.G.C. con varios cortes en la mano y heridas en la cara, quien les manifestó que había tenido una discusión con los compañeros de piso, que se había alterado y que había destrozado toda la vivienda.
Sólo unos minutos más tarde comenzó a salir fuego de la planta alta, teniendo los agentes que proceder al desalojo de la vivienda y dando aviso del incendio a los bomberos.
Los agentes pidieron refuerzos de la Policía Local y la Guardia Civil, desalojando también a los vecinos de las casas colindantes, haciéndose los bomberos cargo del incendio.
R.G.C. fue detenido en Playa Honda, por un supuesto delito de daños, agresión y amenazas, siendo éste informado de inmediato de los derechos constitucionales que le asisten de conformidad con lo dispuesto en el artículo 520.2 de la Ley de enjuiciamiento criminal.
Tras ser trasladado al Hospital General de Lanzarote para la cura de las heridas, pasó a las dependencias de la Policía Local de San Bartolomé, donde se le instruyeron las diligencias pertinentes.
Fue durante la realización de estas diligencias cuando el detenido comenzó a alterarse, dándose cabezazos contra la pared y ofreciendo una fuerte resistencia a los agentes, a los que también insultó, pasando posteriormente a disposición de la Autoridad Judicial.
