La intensa niebla que cubrió la pista del aeropuerto César Manrique de Lanzarote obligó a desviar 14 vuelos a los aeródromos de Gran Canaria, Fuerteventura y Tenerife Sur, según informó Aena. Una inversión térmica provocó una densa capa de neblina a cotas muy bajas, inferiores a los 200 metros de altura, que disminuyó considerablemente la visibilidad en el aeropuerto conejero hasta apenas los 50 metros, provocando que al menos entre las 17.00 y las 00.00 horas se vieran afectadas las operaciones de llegadas y salidas de los vuelos.
En concreto, ocho vuelos nacionales e internacionales tuvieron que desviarse a Gran Canaria, cinco lo hicieron a la isla de Fuerteventura y, por último, un avión fue desviado a Tenerife Sur. "A lo largo del día se irán reprogramando los vuelos", señalan desde Aena.
Según han informado desde el Consorcio de Emergencia "con las condiciones que hay para este lunes no habrá problemas para operar. Hay un viento más intenso y la base de la inversión ahora es más grande y no como este domingo que estaba en superficie y no permitía la visibilidad".
