Las máquinas y los obreros han parado su actividad a media mañana de este lunes. Trabajaban en una parcela de la calle Balayo esquina con la calle León Felipe, situada en el barrio arrecifeño de Argana Alta. El motivo de esta parada era una orden de la Concejalía de Urbanismo del Ayuntamiento de Arrecife, que ha llevado a cabo la paralización de las obras, después de que el pasado martes 24 de octubre, agentes de la Policía Local denunciaran a la empresa Construcciones Miguez Lanzarote S.L. por quebrantar el precinto impuesto a esas obras.
Los obreros se encontraban trabajando en labores de cimentación cuando los agentes se han presentado en el lugar y han procedido a retirar la maquinaria y los materiales utilizados en la obra. Además, la orden de la Concejalía de Urbanismo de Arrecife implica otras medidas, como la no concesión en esta parcela del suministro de luz, agua, gas, telefonía y cable a la constructora, además de dar cuenta del incumplimiento del precinto al Ministerio Fiscal.
Enfrentamientos en el Consistorio
Las obras que finalmente han quedado paralizadas en la mañana de este lunes, han sido en las últimas semanas una de las armas arrojadizas que han protagonizado cruce de acusaciones entre Alternativa Ciudadana y Grupo de Gobierno de la capital. El concejal de AC-25M, Andrés Barreto, denunciaba el pasado 17 de octubre que el Ayuntamiento actuaba con "impunidad" permitiendo la construcción de edificios supuestamente ilegales en la calle Balayo.
Por su parte la alcaldesa, María Isabel Déniz, y la concejal de Urbanismo, Nuria Cabrera, se defendían de estas acusaciones, asegurando que, aunque el procedimiento había sido lento, las obras en esa calle, ya estaban precintadas. "Lo que no pueden pretender es que nos pongamos delante de las palas", alegaba Nuria Cabrera sobre la demora del precinto de las obras.
