Según los nacionalistas, "con esta simpleza los socialistas menoscaban las apabullantes conclusiones" emanadas del dictamen realizado por el catedrático de derecho penal, D. Miguel Olmedo, y en las cuales, en base a la auditoría de KPMG, afirma la posible comisión de "un número importante de delitos entre ellos: prevaricación, nombramientos ilegales, malversación de caudales públicos, cohecho, etc".
"Perplejos", así afirman haberse quedado los miembros de Coalición Canaria después de conocer "el repentino cambio de opinión de los socialistas, que hasta el mismo viernes querían querellarse contra los gestores de los centros de Arte, Cultura y Turismo del Cabildo de Lanzarote durante los años 1997-2004 (periodo en que gobernaba el tandem PSOE-PIL)".
Para Coalición Canaria "el giro de 180 grados que están dando los socialistas" con respecto al envío a la Fiscalía de la documentación de la citada auditoría no tiene otra explicación que "el tirón de orejas que han podido haber recibido de algunos de sus candidatos y cabezas de listas a varias instituciones insulares y locales, llámese Enrique Pérez Parrilla o Marcial Martín". Dos políticos que, tal y como puntualiza CC, durante el tiempo auditado ocupaban por un lado la Presidencia del Cabildo y por otro la dirección de los Centros de Arte, Cultura y Turismo y, cuya gestión, ahora se someterá a la investigación del Ministerio Fiscal.
Por último los nacionalistas califican de "inaudito" el punto tercero del comunicado hecho público por el PSOE, en el que afirman mostrar sus dudas con respecto a que la denuncia sea admitida a trámite, considerando que en caso de que fuera admitida, muy probablemente, las diligencias que se practiquen llevarían a su archivo". Coalición Canaria entiende que los socialistas "no creen en la independencia del poder judicial". Los nacionalistas además, dudan, a partir de esta afirmación del Partido Socialista, "de las casualidades que se puedan producir en lo que resta de campaña".
