Álvarez denuncia el "destrozo perpetrado" por Oswaldo Betancort y Olivia Duque a los jardines de Teguise

El candidato de Contigo Teguise reconoce que "recuperar el destrozo costará en torno al medio millón de euros de los vecin@s de Teguise"

18 de mayo de 2023 (15:33 CET)
Actualizado el 18 de mayo de 2023 (15:33 CET)
Estado de las calles de Costa Teguise
Estado de las calles de Costa Teguise

Contigo Teguise denuncia que el abandono del municipio de Teguise se ha derivado de la política "miserable e irresponsable" de Oswaldo Betancort y Olivia Duque que durante una década le ha costado a los vecinos del municipio "más de medio millón de euros". Desde Coalición Canaria se ha seguido al dedillo una política de abandono, de dejar morir la vegetación para luego arrancar el ajardinamiento.

"Especialmente grave ha sido el ataque que Betancort y Duque perpetraron a lo largo de estos últimos años a las palmeras del municipio", argumenta. "En estos años se han arrasado palmerales enteros de la mano de dos políticos que son la vergüenza de Teguise", aclara.

Y es que, por ejemplo, en Costa Teguise, cada palmera tuvo "un coste que los vecinos de la localidad han tenido que abonar a través de la UCCT", recuerda. "Estas palmeras fueron plantadas, abonadas, regadas y mimadas hasta que Oswaldo y Olivia se cruzaron en su camino", deja claro.

"Del concejal para Costa Teguise mejor no hablar porque no veía nada", añade. Para que nos hagamos una idea, en el mercado "una palmera de tres metros se vende a 1800 euros sin tan siquiera plantarla y regarla, con el riesgo que siempre tiene que no enraícen en el suelo". "Sumando setos, palmeras y vegetación en general y comprobando con hoteles que tienen jardines, hemos estimado que recuperar el destrozo costará en torno al medio millón de euros de los vecin@s de Teguise", afirma.

"Lo han destrozado todo, dedicándosea vivir del cuento y a enchufar a amigos"

Laureano Álvarez, candidato a la alcaldía de Teguise, explica que "lo único que tenían que hacer era cuidar la herencia que tenían y, en vez de eso, lo han destrozado todo, dedicándosea vivir del cuento y a enchufar a amigos". "Las zonas verdes arrasadas por Oswaldo y Olivia no sólo son un atentado medioambiental, también un lamentable despilfarro económico”, concluye.

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