"Como vecina del pueblo de Teguise debo decir que admiro infinitamente todas aquellas cosas que se hacen en pro de nuestro municipio, y si esas propuestas están relacionadas con nuestras costumbres y tradiciones, lo apruebo y aplaudo. Pero lo que no puedo entender es que un señor, llamado Benito Cabrera, conocido por su arte con el timple, pretenda profanar unos de nuestros edificios más emblemáticos de La Villa de
Teguise, el Palacio Spínola.
Dicha arquitectura se encuentra situada frente a la Plaza de San Miguel (más conocida por la Plaza de los Leones) y fue construida por Don José Feo Peraza entre 1730 y 1780. Al parecer, su decoración fue asesorada por el desaparecido artista lanzaroteño César Manrique, que probablemente no permitiría llevar a cabo lo que quiere el señor Don Benito Cabrera, que lucha por la continuidad de nuestras costumbres a través de su timple.
La paradoja de esta historia es que este señor, conocedor de la historia canaria y también diría lanzaroteña, persigue desalojar el Palacio Spínola para instalar la Casa del timple, haciendo caso omiso a las recomendaciones sobre lo que esto puede suponer en nuestro pueblo, isla y archipiélago canario.
En el pueblo y municipio existen numerosas casas y lugares donde pueden llevar a cabo este proyecto, que considero positivo para Teguise (cuna del timple) y para la isla. Lo que no puede ser es que un señor llegue a nuestro pueblo y ponga toda la historia y los recuerdos de este monumento arquitectónico y sus vecinos en la calle. ¿Acaso no se puede adaptar las instalaciones del Palacio Spínola, sin tener que desocupar todos sus enseres? ¿No existen otras alternativas viables para realizar la Casa del Timple? ¿No tenemos derechos los vecinos de Teguise, los que hemos vivido y admirado su fachada durante muchos años, a decir algo al respecto?
Cuando era pequeña me sentaba en sus chaplones de piedra, y me gustaría poder hacerlo con mis nietos y contarles historias de este lugar mientras recorremos sus estancias. Siempre me ha emocionado cuando el palacio abría sus ventanas para ver pasar a Nuestra Señora del Carmen el 16 de julio, y qué me dicen cuando se arreglaba la mesa del comedor con su vajilla, copas y cubertería impecables...
Ese lugar tiene mucha historia para los/as trompeteros/as, miles de personas han paseado por sus habitaciones, otros tantos han decidido pasar unos de los días más importantes de sus vidas entre sus paredes cuando han decidido consagrarse en el matrimonio, muchos hemos presumido de su belleza con amigos, familiares o conocidos... Ahora lo que vamos a tener es el recuerdo de lo que fue, porque nadie nos ha preguntado si queremos que se haga esta masacre con el Palacio Spínola de Teguise...
Los Leones de la Plaza de San Miguel, la Iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe y su Torre, así como los miles de vecinos de Teguise lloramos por la despedida del Palacio Spínola".
