José Francisco Reyes delinquió. No lo dice un medio de comunicación que le "persigue", ni la oposición que le tiene inquina.Ni siquiera el Ministerio Fiscal. Ahora lo dice directamente el Juzgado Penal de Arrecife, que ha condenado ...
José Francisco Reyes delinquió. No lo dice un medio de comunicación que le "persigue", ni la oposición que le tiene inquina.Ni siquiera el Ministerio Fiscal. Ahora lo dice directamente el Juzgado Penal de Arrecife, que ha condenado al ex alcalde de Yaiza a diez años de inhabilitación política y a pagar una multa de casi 26.000 euros por un delito de prevaricación urbanística en la concesión de una licencia en suelo rústico de protección territorial.
Después de años viendo cómo Reyes concedía licencias contraviniendo el Plan Insular, el propio Plan General de su municipio, los planes parciales y hasta las indicaciones de sus técnicos, por fin la Justicia se ha pronunciado, y le ha considerado culpable.Y el camino judicial no ha hecho más que comenzar.
De hecho, el caso que le ha costado su primera condena es sólo el primero de los que le llevarán al banquillo de los acusados. Y también el menos grave. Incluso, es hasta anecdótico comparado con otros que están pendientes de juicio o en fase de investigación.Pero desde luego, suficiente para que el Juzgado haya decidido retirarle de la vida política durante diez años.
La ingenuidad exhibida por José Francisco Reyes durante el juicio no convenció a la sala.Tampoco sus lapsus de memoria y sus esfuerzos para aparecer como un ignorante en materia urbanística.
La sorprendente afirmación de que no leyó los informes antes de conceder esa licencia y que "en general no lee documentos" no le ha eximido de responsabilidad ante el juzgado de lo penal.Tampoco que asegurara que "aunque los leyera, poco voy a entender porque no entiendo de urbanismo ni de ese tipo de leyes".
La sentencia considera probada la acusación de la Fiscalía, que durante el juicio defendió que hasta tres técnicos municipales, además de la presidencia del Cabildo, advirtieron a Reyes que era suelo rústico, y aún así concedió la licencia.Él, según su declaración, se "imaginó" que era suelo urbano, "porque está rodeado de casas".
Con este fallo, se derrumba definitivamente su discurso victimista.Su manido lamento de que es una pobre víctima de persecuciones políticas y mediáticas.Su cantinela de que el Cabildo intentaba frenar el desarrollo de su municipio.Pero sobre todo, se termina su impunidad.Por primera vez, la Justicia sentencia que cometió un delito en la concesión de una licencia.De una de las decenas de licencias que otorgó durante su oscuro mandato, algunas a velocidad de vértigo y ocultándoselas al Cabildo, pese a que según él no tenía ni idea de lo que hacía cuando firmaba esos permisos.Por eso, esto es sólo el principio.Por delante, el ex alcalde de Yaiza tiene pendiente un largo periodo de visitas a los tribunales, y para dar cuenta de asuntos de mucha envergadura.El primero, será para responder de un presunto delito continuado contra la ordenación del territorio, por la concesión de nueve licencias para la construcción de viviendas en una finca rústica.Y en este caso, los motivos de la acusación son muy similares a los que le han llevado ya a su primera condena.Autorizó las obras ignorando el Plan Insular y la calificación territorial de ese suelo.Además, Reyes también debe enfrentarse a la querella criminal por la concesión de la licencia de las mil viviendas de Costa Roja y, sobre todo, a la investigación que no analiza una licencia en concreto, sino todo un modo de proceder durante cinco años, concretamente entre 1998 y 2003, en los que Reyes concedió más de 30 licencias de obras y prórrogas de otras caducadas, que están bajo sospecha de corrupción.Y es que en este caso, no sólo se le acusa de un delito de prevaricación, sino también de blanqueo de capitales, cohecho y tráfico de influencias.Ahí es donde de verdad se pretende ir al fondo del asunto y aclarar por qué José Francisco Reyes concedía licencias ilegales, y si obtenía algún beneficio a cambio.De hecho, el Juzgado autorizó que la Unidad contra el Crimen Organizado rastreara el patrimonio del ex alcalde y de su entorno.
Sin duda, la justicia es lenta y los procesos complejos pero, de momento, ya ha dado una primera lección.Para José Francisco Reyes y, en general, para todos aquellos en los que el pueblo deposita su confianza.La ley está escrita para todos, y al estar cara a cara ante un juez, ni la demagogia, ni las excusas, ni las llantinas de que el mundo está en tu contra sirven de nada.
