Antes de hacer la elección de una furgoneta, se deben considerar una serie de factores, como el tamaño y la capacidad, aunque no son los únicos.
Existen muchas ofertas furgonetas, por lo que los profesionales van a poder escoger entre una amplia gama de modelos y marcas, tanto nuevos como del mercado de ocasión. Aquí tienes algunas cuestiones que hay que tener en cuenta antes de elegir.
El tamaño
Cuando vamos a adquirir una furgoneta para nuestro negocio, lo primero en lo que debemos fijarnos es en la longitud. Así, tenemos vehículos con longitudes que van desde la L1 a la L4. Es relevante conocer esta nomenclatura, pues es la que se usa al describir a las furgonetas en los anuncios.
A su vez, también es necesario ver cuál es la altura del techo. Esta va desde la H1 a la H3 y será la que nos diga la altura de los objetos que vamos a cargar.
Si lo pasamos a metros cúbicos, estos van desde los 2 que tiene una furgoneta pequeña (L1H1) a los 15 que puede alcanzar un vehículo L4H3.
¿Qué combinación de longitud y altura escoger?
Esto va a depender de lo que se cargue dentro y de por dónde se vaya a mover la furgoneta. No hay que pensar que la más grande siempre es mejor, puesto que esto no es cierto.
Los tamaños más extremos hay que evitarlos a toda costa, a no ser que sean estrictamente necesarios. Un vehículo de estas dimensiones nos permitirá cargar casi cualquier cosa, pero a cambio de un alto consumo de combustible y de dificultades al maniobrar en ciudad.
En zonas urbanas siempre conviene un tamaño más contenido. De hecho, muchas veces será mejor hacer dos viajes que llevar una L4 o L3, pues serán imposibles de aparcar y siempre se estarán recibiendo multas.
Las furgonetas eléctricas son interesantes en algunas circunstancias
Ya hay varios modelos de furgonetas eléctricas, aunque lo cierto es que su autonomía es bastante limitada, al no pasar de los 200-250 kilómetros. Además, hay que saber que será menor si la cargamos con muchos kilos.
A pesar de ello, lo cierto es que en algunos casos puede ser una opción interesante. Por ejemplo, aquellos repartidores que no salen de la ciudad aprovecharán sus ventajas, al igual que los que hacen repartos por las zonas cercanas a su negocio.
¿Caja de cambios automática o manual?
Las furgonetas se pueden comprar con cajas de cambios automáticas, las cuales aportan comodidad, pero poseen una vida útil menor y requieren de un mayor mantenimiento.
Hay que pensar en cuánto tiempo vamos a conservar el vehículo. De ese modo, si la idea es exprimirla hasta que tenga varios cientos de miles de kilómetros, lo mejor es optar por una caja manual al ser más resistente.
Por el contrario, si vamos a vender la furgoneta con pocos años y no demasiados kilómetros, sí que será una buena idea decidirse por una caja automática al no tener que arreglarla ni apenas mantenerla en ese tiempo.