El distintivo ambiental que lucen algunos coches tiene como objetivo discriminar positivamente a los vehículos más respetuosos con el medio ambiente. En algunas ciudades ya se está utilizando este distintivo ambiental a la hora de restringir el tráfico en los días de alta contaminación, prohibiendo la circulación a los vehículos que carecen de él.
En la actualidad existen cuatro tipos de distintivos, que son emitidos por la Dirección General de Tráfico. En Canarias el 27,60% del parque automovilístico de Canarias no dispone de ninguno, según ha informado Faconauto, patronal de concesionarios automovilísticos.
Los vehículos más eficientes llevan el distintivo CERO, se trata de los coches eléctricos e híbridos enchufables y representan solo el 0,81% del parque canario.
En segundo lugar existe la etiqueta ECO para los vehículos híbridos. Sólo el 2,34% de los vehículos de Canarias lo llevan. Este distintivo incluye coches eléctricos de batería (BEV) , eléctricos de autonomía extendida (REEV), así como híbridos enchufables (PHEV) con una autonomía de 40 km o vehículos de pila de combustible.
En tercer lugar, la etiqueta B o amarilla es para turismos de gasolina matriculados a partir de enero de 2000 y de enero de 2006 para los diésel. El 22,12% de los coches canarios la llevan.
Por último la etiqueta C o verde, la reciben los turismos de gasolina matriculados a partir de enero de 2006 y diésel a partir de 2014. Es la que lucen el 47,13% del total de turismos canarios.
La media de antiguedad de los coches canarios es de 15 años
Faconauto también ha analizado la evolución de la edad media del parque automovilístico de Canarias, que a lo largo del pasado año se situó en los 15 años de antigüedad. La media nacional es de 13,9 años.
La patronal de concesionarios atribuye este fenómeno a la debilidad del mercado y la consecuente crisis de matriculaciones, arrastrada desde la pandemia por los problemas de stock.
Para la patronal de los concesionarios, el conjunto de la cadena de valor del sector de la automoción, así como Administraciones Públicas y agentes políticos, deben colaborar y tener como eje esencial a la electrificación y a la movilidad sostenible.
Según indica el director de comunicación de Faconauto, Raúl Morales, “en 2024 se tiene que producir un punto de inflexión en las matriculaciones de vehículos electrificados, que pasa, necesariamente, por introducir mejoras en el Plan Moves y cambios en la fiscalidad”.
“Creemos esencial que desde el Gobierno central se ayude a las comunidades autónomas en la homogenización de su gestión del plan, que se busque la fórmula para que el comprador obtenga el descuento del vehículo en el mismo momento de la adquisición, que se amplíe el límite de la ayuda hasta los 65.000 euros y que se asegure su continuidad dotándolo con un presupuesto de 600 millones de euros anuales”, añade.
Del mismo y, desde la patronal, se fija como objetivo deseable los 190.000 vehículos electrificados en el próximo año 2024, con un 19% de cuota de mercado. “Para que nuestro país se acerque a los objetivos de descarbonización que establece el PNIEC, la cuota de mercado de turismos y todoterrenos electrificados tendría que incrementarse en siete puntos al año de aquí a 2030, cuando supondrían el 60% del mercado y 600.000 matriculaciones”, subraya Morales.
