El presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha sido declarado persona "non grata" en Lanzarote. El mandatario de la compañía petrolera calificó al pueblo canario de "tercermundista" por mostrar su oposición a la realización de prospecciones petrolíferas frente a sus costas. Igualmente tildó aquel proceso como un "dolor de muelas serio" para la compañía. El Cabildo de la isla se suma, así, al acuerdo del Parlamento de Canarias del pasado 23 de marzo, que durante el debate sobre el estado de la nacionalidad aprobó dicha declaración de persona "non grata" hacia Brufau.
La propuesta, que fue elevada al Pleno por el Grupo de Gobierno (Coalición Canaria, Partido Socialista Canario y Partido de Independientes de Lanzarote), contó con el voto a favor de Nueva Canarias, el Grupo Somos, Ciudadanos y Podemos. El Partido Popular se abstuvo, al igual que lo hizo durante el Pleno del Parlamento.
"Un insulto y una falta de respeto a Canarias y a su gente"
El presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, ha afirmado que dichas declaraciones "son merecedoras de una severa condena pública, por haber faltado el respeto al pueblo y a las instituciones públicas de Canarias en su rechazo masivo, pacífico y unitario a las prospecciones". Ha asegurado también que éstas "no pueden más que entenderse como un insulto y una falta de respeto a Canarias y a su gente".
San Ginés ha coincidido igualmente con la Cámara regional en calificar de "tercemundismo" al hecho de que existan "multinacionales que no escatimen en esfuerzos de esquilmar recursos naturales de la tierra, en un mundo en que sociedades más avanzadas caminan en otra dirección, como modelos donde las energías fósiles tiene cada vez menos prioridad". "En esto último precisamente está trabajando desde hace unos años el Cabildo, y en concreto el Consorcio del Agua, con el cambio del modelo energético que se está llevando a cabo", ha añadido el presidente del Consorcio.
