El pasado fin de semana concluyó en aguas de la Bahía de Palma, la cuarta edición de la Liga Española de Vela. Competición organizada por la Real Federación Española de Vela, el CN Altea (sede del primer evento) y CN Arenal (sede de la fase final) con un total de siete equipos participantes provenientes de todo el país. Una de las últimas regatas del calendario de regatas y también una de las que tiene más atractivo, pues los tres clasificados de esta Liga Nacional del Vela, tienen el pase para participar en la Sailing
Champions League o lo que viene siendo la Liga Europea de Vela, reservada a los mejores equipos del continente.
Este año se han disputado dos eventos de esta Liga Española. Primero fue en Altea durante el mes de octubre y y ahora en El Arenal (Mallorca). En total se navegaron 42 mangas de las 52 programadas previamente y en la fase final, el flojo viento sólo permitió que se regatearan dos de las tres previstas. A la fase final pasaban los 6 primeros clasificados arrastrando todos los puntos que habían acumulado a lo largo de la competición y en las regatas de la fase final la puntuación valía doble. Gracias a la ventaja de puntos que tenía el equipo valenciano fue suficiente para mantenerse en el liderato ya que su inmediato seguidor, el “Lanzarote European Sports Destination” que representaba al RCN de Arrecife, no pudo superarles a pesar de acortar distancias en cada jornada y de llevarse el triunfo de la última manga final.
Ahora toca Europa
Tras esta cuarta edición de la Liga, los equipos mejor clasificados tienen la opción de medirse a los mejores equipos de Europa, muchos de ellos profesionales y de un altísimo nivel. Para ello hay tres semifinales a las que pueden acudir para ganarse un puesto en la deseada final europea. Esta fase previa se celebrará en Vilamoura (Portugal) del 23 al 26 de marzo, en Berlín (Alemania) del 20 de marzo al 4 de abril y en Sopot (Polonia) del 15 al 18 de junio. Quienes logren la clasificación tendrán el pase directo a la gran final que se celebrará en Travemunde (Alemania) del 22 al 25 de julio.
Monotipos para que la competitividad sea máxima
En esta competición, se navega con barcos exactamente iguales. En el primer evento disputado en Altea se regateó con los Platú 25, ahora en El Arenal han navegado con los Bavaria B-One y en todas las pruebas de la cita europea se compite a bordo de los J70. Pero no sólo se trata de que todos los barcos sean iguales, como en cualquier otra regata de monotipos, sino que aquí los equipos van rotando de embarcación cada dos mangas, de manera que todos navegan contra todos y en todos los barcos. Este original sistema de competición premia mucho más la valía de las tripulaciones y no tanto la puesta a punto de las embarcaciones.