La mujer detenida en el barrio arrecifeño de San Francisco Javier iba de copiloto en un vehículo cuyo conductor dio positivo en alcoholemia y, según la Policía, fue arrestada tras "insultar a los agentes" y dar "varios manotazos en los brazos" a uno de ellos, que intentaba que "no se marchara del lugar".
El atestado policial, al que ha tenido acceso La Voz, confirma que inicialmente los agentes no tenían intención de detener a la mujer, que sin embago acabó siendo empujada por un policía, que terminó reduciéndola en el suelo. No obstante, se afirma que en el momento de su detención, ésta "escupió" en la cara y "arañó" en los brazos a un agente.
La intervención tuvo lugar sobre las 16:00 horas del pasado domingo y se inició después de que los policías observaran "por la calle Isabel La Católica" un vehículo que circulaba "de forma anormal, zigzagueando y realizando maniobras extrañas".
Tras ello, según el acta policial, los agentes procedieron "a darle el alto, consiguiendo parar el coche, que circulaba en dirección contraria", en la calle Cardenal Cisneros, que es donde vecinos grabaron la detención de la mujer. Antes de ello, los agentes afirman que "invitaron a los pasajeros a salir del vehículo", en el que viajaban cinco personas, y procedieron a realizar el test de alcoholemia al conductor, "ya que tenía síntomas evidentes de haber consumido alcohol". En el mismo, se apunta que arrojó un resultado de "0,90 miligramos/litros por aire espirado".
Una vez finalizó la prueba, los policías aseguran que la copiloto del vehículo "comenzó a ponerse muy agresiva", poniéndose "a insultar a los agentes con frases tales como 'malparidos, gonorreas, viejos, hijos de puta'". En el atestado, se afirma que la mujer "comenzó a huir del lugar", ante lo que un agente "se interpuso en su camino", comenzando la misma "a darle varios manotazos en los brazos".
"Dado que la mujer acomete contra el agente, es por lo que se procede a la detención de esta persona, comenzando en ese momento a escupirle en la cara y a arañarlo por los brazos, no sin antes informarle in situ y de manera comprensible del motivo de ésta y de los derechos que le asisten como tal", sostienen los policías.
Asimismo, se apunta que, durante la detención, otro agente "tuvo que sujetar a uno de los pasajeros del vehículo" y que, como consecuencia de ello, las gafas que portaba el policía quedaron "totalmente fracturadas e inservibles".
Tras ello, se indica que se solicitó apoyo a la Policía Nacional, cuyos agentes trasladaron a la detenida al centro de salud de Valterra, que fue atendida en Urgencias.