Carlos Eduardo Ricciardi, un italoargentino de 69 años de edad residente en Lanzarote desde 2016, ha convertido un solar al aire libre de la calle Enrique IV del barrio San Francisco Javier lleno de residuos y basura, en un jardín precioso con plantas autóctonas canarias como el aloe, la buganvilla... y hasta cuadros pintados con sus propias manos.
"Vivo en la calle desde hace unos años y vi que estaba muy descuidado", relata a La Voz. "Lo utilizaban como vertedero y los perros de los vecinos de la zona hacían sus necesidades en el interior", comenta. "Hablé con el dueño, ya que el solar se encuentra a la venta y le comenté la idea", añade.
"Decidí ponerme a limpiarlo y acondicionarlo con la ayuda de mi pareja Daniela". "Empezamos en septiembre de 2019, poco a poco plantando alguna planta, dándole color, etc", confiesa. "En 2022 acabamos el acondicionamiento esencial", aunque "actualmente sigo trabajando en ello", recoge.
Además, el jardín tiene colgados unos cuadros de madera que "yo mismo he pintado a mano con acrílico", asegura. Para una de las pinturas, "me he inspirado en un hotel de Playa Blanca", uno con "un decorado similar al de una cueva", añade.
"No me planteo comprar el solar, el precio es prohibitivo para mí", comenta. Solamente quería hacer el arreglo para "dar ejemplo y transmitir que todos podemos poner nuestro granito de arena para cambiar nuestro entorno, sin esperar a que todo venga hecho", destaca.
"Todos podemos poner nuestro granito de arena para cambiar nuestro entorno"
"Todo el vecindario está contento con el arreglo", hasta algunos vecinos "me han donado plantas para que siga decorando el solar y he logrado que me lo cuiden cuando me voy de vacaciones", destaca. Y es más, otros residentes en calles cercanas, "me han cogido la idea para implantarlo", afirma.
Este profesor de Educación Física, aunque ya jubilado, reconoce que "cabía la posibilidad de que me rompieran el jardín", pero "fue todo lo contrario". Aunque él ha tenido claro desde el principio que "lo volvería a hacer de nuevo si lo rompieran".
"He logrado con buen rollo y ejemplo cambiar la actitud de la gente"
"He logrado con buen rollo y ejemplo cambiar la actitud de la gente", confiesa orgulloso. "Al inicio llegué a hablar con los vecinos que ensuciaban el solar y les dije que les hacía un rinconcito pero con la condición de que no lo volvieran a ensuciar", añade. Cuando pasaron los días, fui viendo que "se sentaban a conversar en el rincón pero ya no ensuciaban", comenta con ilusión.