El psicólogo Jose Noda: "Cuando enfocamos el deporte solo a resultados, la salud mental es la que paga"

Sobre el positivismo tóxico que se vende en redes sociales indica: "¿Tenemos límites? Sí, por supuesto"

1 de junio de 2025 (13:08 WEST)
El psicólogo experto en Psicología Deportiva Jose Noda.
El psicólogo experto en Psicología Deportiva Jose Noda.

El psicólogo experto en Psicología Deportiva Jose Noda ha ofrecido una entrevista con La Voz con motivo de su participación en unas jornadas sobre la promoción de la salud mental y la prevención de la conducta suicida, celebradas a mediados de mayo en Lanzarote, y donde compartió su experiencia como psicólogo deportivo.

Su trabajo se centra en la búsqueda del bienestar del paciente y lograr así la mejora del rendimiento. Jose Noda nació en Lanzarote, pero desde hace 15 años salió de la isla. Primero, para estudiar Psicología en Salamanca, luego se mudó a Madrid para estudiar la especialidad deportiva. En la capital española comenzó su andadura como parte de cuerpo técnico de la cantera del Real Madrid Club de Fútbol. Desde hace un año, Noda compagina su vida en Madrid con colaboraciones con clubes locales.

Durante la entrevista, el experto ha explicado que en el deporte, igual que en otros ámbitos, cada persona carga "con una mochila de cosas buenas, dificultades y cosas menos buenas". Así, defiende que el ejercicio puede "aumentar la intensidad de la problemática que traigas de casa o diluirla", pero para ello "depende de que tengas el entorno adecuado". 

Para el psicólogo deportivo es importante que exista "una buena relación" con la práctica deportiva, "que no haya una obsesión ni una presión excesiva". A lo que añade que para que el deporte beneficie a la salud mental, se deben cumplir "una serie de requisitos". 

Además, alerta sobre el riesgo de basar el deporte únicamente en los resultados físicos y usarlo simplemente como un medio para llegar a tener un cuerpo con unas determinadas características . "Cuando el deporte solamente lo enfocamos a resultados o a ganar algo, la salud mental es la que paga el precio de ese objetivo", expone.

A ello añade que "la tristeza no es negativa, el enfado no es negativo, lo que es negativo es lo que hacemos con esas emociones" y que aunque en redes sociales haya influencers que muestren que se levantan a las 5 de la mañana, "hacen 100 burpees y luego tienen tiempo para hacer 1000 cosas al día, eso es un poco irreal".

 

La importancia de un entorno seguro

Este experto señala que cuando un niño o niña que practica deporte se ve únicamente valorado cuando ha obtenido un buen resultado, "esa persona va a asociar que su autoestima tiene valor cuando las cosas le salen bien y no tiene valor cuando no consigue ese resultado". 

Así pues, señala que si el contexto no es sano "lo que puede ser un factor de protección a la conducta suicida o promoción de la salud mental, sin las condiciones adecuadas, puede ser todo lo contrario". De modo que, en espacios donde se fomenta la rivalidad entre compañeros o donde los entrenadores son demasiado estrictos el efecto puede ser negativo.

Por ejemplo, si se trata de alguien que proviene de una familia desestructurada, si el entorno deportivo es tóxico puede "agravar más" su situación y hacer más daño. 

Frente a ello, Noda indica que cuando el deporte está bajo un "paragüas positivo", "ese entorno deportivo potencia la red de apoyo, se crean vínculos de calidad, que son perdurables en el tiempo y que además sirven de ayuda porque logra vínculos que quizás con su familia en casa no tiene". 

 

El peligro de la positividad tóxica

Ante los mensajes repetidos en redes sociales con mantras como: "Si quieres puedes" o "el límite está en tu mente", este profesional defiende que reflejan "una realidad utópica, que es mentira y además no es bueno ni positivo".

Así, continúa añadiendo que aunque el "mensaje vende muchos libros y a nivel motivación es un chute de adrenalina, luego hay que trasladarlo a la realidad".

"¿Tenemos límites? Sí, por supuesto", apostilla, "el límite también es físico, que le pregunten a una persona de 1,30 o 1,50 a la que le proponen el reto de hacer un mate a dos manos en un aro de la NBA, que está a 3,05 metros de altura, pues probablemente no lo consiga". 

Finalmente, propone "conocer cuáles son mis capacidades que puedo hacer yo y cuáles son mis límites". Así, añade que "no pasa nada por reconocerlo, de hecho, al contrario, reconocer que puedo tener límites en según qué ámbitos o en según qué momento me va a ayudar a gestionar mejor la situación". 

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