Arturo Ramírez, presidente de Cruz Roja Lanzarote, hizo un balance de las actividades y logros de la ONG en el pasado año 2005 para los lectores de LA VOZ, además de explicar los proyectos más ambiciosos para este año. "El 2005 según desde la óptica que se mire ha sido muy positivo, pero también muy negativo".
Como una de las actividades de más éxito y una de las más recientes fue destacada la campaña de Reyes, que fue calificada como "muy positiva, porque se han recaudado más de mil juguetes, pero además juguetes de gran calidad, como si el regalo lo hicieran los colaboradores a sus propios hijos".
Implantación del voluntariado
Entre otras cosas positivas del año destacó Ramírez "la implantación de voluntariado", que se ha incrementado en 2005. En la actualidad, la ONG cuenta con unos mil voluntarios censados, aunque son unos 150 los que trabajan día a día en las diversas áreas de Cruz Roja ayudando a los más necesitados.
Cruz Roja cubre prácticamente todas las parcelas de ayuda a los necesitados. Desde la ayuda a los países del Tercer Mundo, hasta el trabajo con la juventud o con las personas mayores. Precisamente esté último punto fue destacado sobre los demás por el presidente de la ONG., que habló de la utilidad de las telealarmas, pensadas para las aquellas personas mayores que viven sólos y necesitan de un canal para solicitar ayuda en caso de necesitarla.
En este caso, unos 130 mayores de toda la Isla poseen esta pulsera, que les permite llevar una vida sin recurrir a sus familias o residencias para ancianos. "Si a una persona la desarraigas y la sacas de su ambiente, le quetas muchísima vida. Entonces con este aparato se logra que la persona viva muchos años en su ambiente de toda la vida".
Por otra parte, se ha ampliado la cobertura de socorrismo en las playas del litoral conejero. Y así, Cruz Roja ha incorporado una dotación en la Playa de Guacimeta, que recientemente ha ganado el distintivo de Bandera Azul.
Sombras
En cuanto a los medios materiales la ONG se queja de una situación "muy mala", como la definió el presidente de la ONG. "En ambulancias concretamente hay una normativa del Gobierno de Canarias que exige que tengan como máximo una antigüedad de ocho años.
Nosotros tenemos dos ambulancias a las que tenemos que dar de baja, aunque tenemos otras dos nuevas que van a llegar a Lanzarote". Lo negativo es que los nuevos coches no supondrán un aumento de la flota de vehículos de Cruz Roja, objetivo que desde hace tiempo persigue Arturo Ramírez. "Nos hemos visto incluso fines de semana sin ambulancias para cubrir todos los servicios".
