Fotos: Sergio Betancort
Miles de lanzaroteños se acercaron a la capital lanzaroteña a disfrutar de la cabalgata de los Reyes Magos, que este año contaba con muchas y variadas novedades, entre ellas el recorrido que fue inverso al de los años anteriores. Los Magos de Oriente es un proyecto de Salvador Leal, director del Compañía de Teatro Losótroh , que el concejal de Fiestas del ayuntamiento de Arrecife asumió. No solo llevó a cabo el recorrido de la cabalgata sino que además incluyeron muchos más cambios hasta ahora nunca vistos en la capital de la isla.
El cortejo lo encabezaban siete carrozas con vistosas alegorías, muy bien trabajadas y dedicadas a los pequeños protagonistas de una noche tan especial . A su paso todos aquellos que iban en las mismas tiraban los cuatro mil kilos de caramelos al numeroso público que se había congregado a lo largo y ancho de la avenida marítima. A escasos metros se vislumbraba una nutrida comitiva formada por unas treinta personas arropando a los Magos de Oriente, Melchor, Gaspar y Baltasar. Majestades que este año estrenaron una silla diseñada para cada uno de ellos que se venía utilizando años anteriores, la llamada silla de cruz. Otra novedad fue la vestimenta, característica de la época que lucían Los Magos de Oriente tal y como se reflejan en los pasajes bíblicos, nada ostentosas . Además, sus cabezas estaban cubiertas con unos turbantes de seda natural quedando así suprimida la corona. Cada uno de ellos portaba un cofre donde llevaban los presentes, Oro, Incienso y Mirra.
También toda la comitiva formada por pajes y camelleros iba caracterizada con las vestimentas de aquella época y portaban unas antorchas con iluminación led nada molesta para la vista del público y así se sustituyó por los mechones de petroeo y bengalas.
Una vez los Magos de Oriente llegaron a la conocida como "Boca del Muelle", se adentraron por el pasillo que conduce hasta el castillo de San Gabriel haciendo una parada a la altura del puente. En ese momento descendieron de sus camellos y uno de sus pajes pidió la presencia de la alcaldesa de la Ciudad de Arrecife, Eva de Anta para entregarle cada uno de los cofres que habían portado desde Oriente. En su interior traían "igualdad, solidaridad y tolerancia". Tras entregarlos toda la comitiva continúo su camino hasta el castillo donde los Magos de Oriente se retiraban a descansar para luego visitar a cada uno de los hogares donde niños y mayores esperan con ilusión el amanecer para ver si sus sueños se han hecho realidad.
