“Nosotros creemos que los trabajadores de Lanzarote Bus no están implicados en esto”. Así han respondido desde Intersindical Canaria a la denuncia presentada por la empresa Adomari Bus ante la Guardia Civil, por un delito de daños en sus guaguas, que amanecieron el pasado sábado con las lunas rotas y las ruedas pinchadas. Desde la empresa apuntaban a trabajadores en huelga de Lanzarote Bus, ya que aseguran que previamente habían recibido amenazas, por haber empezado a prestar uno de los servicios que no se estaban cubriendo con motivo de ese paro.
De hecho, aseguraba que hay incluso mensajes y audios enviados por trabajadores de Lanzarote Bus a uno de sus empleados. “Yo creo que eso no ha existido, y si la empresa dice que ha denunciado a la Guardia Civil lo sucedido, pues será la autoridad la que averiguará si son o no. Si son, cada uno asumirá consecuencias sobre lo que ha hecho”, ha señalado al respecto el secretario de Acción Social de la Federación de Transporte de Intersindical Canaria, José Manuel Moreno, tras ser consultado por La Voz.
No obstante, ha insistido en que “duda mucho” de que haya trabajadores de Lanzarote Bus implicados. Al respecto, defiende que cuando hay una huelga “se suma mucha gente que no pertenece al sector y que aprovecha cualquier cosa para desahogarse con cualquier tipo de actos”. “Nosotros no vamos a estar controlando toda la gente de Lanzarote, hay de todo en la isla”, ha añadido, apuntando también que puede haber trabajadores de Adomari que tengan “algún problema con la empresa” o que hayan sido despedidos y que “aprovechan estas épocas”
Incluso, ha llegado a apuntar que podría haber sido “alguien de la empresa para cobrar la póliza de seguros”. “Si ellos dudan de los trabajadores, yo también puedo dudar de la parte empresarial”, ha sostenido.
Además, ha defendido la “actitud” de los trabajadores de Lanzarote Bus en esta huelga, asegurando que no han respondido a las “provocaciones” de “algún esquirol que ha querido salir” a trabajar.
Respecto a Adomari Bus, no ha querido pronunciarse sobre el hecho de que estuviera prestando uno de los servicios que daba Lanzarote Bus y que se había visto suspendido por la huelga. “Si la han contratado o no, no lo sabemos ni lo vamos a estar averiguando. Si la empresa cubre estos servicios, me parece bien que los cubra, yo en eso no voy a dar ninguna opinión”, ha señalado.
En cuanto al hecho de que Adomari Bus afirme que eso ha generado primero amenazas y luego un ataque a sus vehículos, el representante de Intersindical Canaria insiste en que “será la autoridad quien diga si fueron o no trabajadores de Lanzarote Bus”. “Nosotros nunca queremos que esto suceda”, ha asegurado.
“Los trabajadores no van a ceder si no se quita la jornada partida”
Respecto a la huelga, José Manuel Moreno afirma que “los trabajadores no van a ceder a menos que se les quite la jornada partida”. Junto a esa reivindicación, también exigen una subida de salario, que no se actualiza desde hace años.
Sobre este último punto, Moreno sí reconoce “algunos avances” en las negociaciones. Concretamente, desde la empresa proponen “una subida del cinco por ciento” a partir de enero, y de “un doce por ciento” a partir de junio. No obstante, ha querido recalcar que en agosto de 2015 les descontaron, “sin advertencia ninguna”, 222 euros en la nómina de cada trabajador.
“Le hemos dicho a la empresa por activa y pasiva, que lo económico se podía defender en una asamblea, y que los trabajadores así lo aceptarían”, ha afirmado Moreno, que ha añadido que “se podría llegar a un acuerdo” si la empresa contemplase la eliminación de la jornada partida. Con ello, considera que “podrían acercarse a la cantidad económica propuesta por la empresa”.
