Jesús Ruiz, uno de los vecinos de las cien viviendas de Titerroy, conocidas como las viviendas de Juan Luis Salazar, ha estado este martes en el programa Buenos días, Lanzarote de Radio Lanzarote-Onda Cero para hablar sobre la situación en la que se encuentra él y el resto de vecinos ante el ruido de los partidos del pabellón del barrio debido a su falta de insonorización.
En el programa, Ruiz ha señalado que "quienes gestionan el pabellón de San José Obrero han tomado como una guerra personal con los propietarios y con los vecinos del barrio, haciéndonos la vida imposible por querer solamente regularizar las cosas".
En este sentido, el vecino ha contado que "han ido a hablar con ellos para que cumplan el horario". Y es que manifiesta que cuando hay partidos en el pabellón "no se puede vivir porque no solamente es el partido y son los gritos, sino que traen tambores, pitos y cornetas, y están desde las cinco de la tarde hasta las once de la noche haciendo ruido... ¿qué cuerpo resiste eso?".
De hecho, durante la entrevista ha desvelado que este lunes sufrió un ataque de ansiedad a raíz de esta situación. "Me tuve que ir a Urgencias, lo he pasado muy mal y creo que no hay derecho a esto tampoco", ha dicho.
Además, Ruiz ha asegurado que está teniendo "problemas" con los directivos y que la situación "está en manos de la policía". Sin embargo, ha apuntado que a pesar de que han llamado a la policía por esta situación, "nos dicen que no pueden hacer nada, se lavan las manos y dicen que es el Ayuntamiento quien tiene que actuar".
"No tenemos nada personal contra ellos, lo que le pedimos a la Concejalía de Deportes es que regularice el pabellón porque no está insonorizado como dice la ley, la cual señala que si están en medio de una población deben estar insonorizados si no están a más de 200 metros de las viviendas", ha continuado.
Asimismo, ha explicado que el techo es de aluminio, "lo que agrava el sonido mucho más, el edificio tiembla cuando vienen con los tambores".
Por último, ha señalado que no han recibido respuesta, pero ha advertido a las autoridades que "nosotros vamos a llegar hasta el final y si tenemos que llegar a juicios, lo haremos, porque lo que no se puede es que todo el dinero sea para fiestas y después los vecinos que hemos trabajado y cotizado toda la vida, no tengamos derecho a nada".
