El Ejecutivo canario, a través de la Consejería de Infraestructuras, adelanta trabajos de reordenación de los pantalanes del puerto de Playa Blanca y coloca además cuatro defensas, en forma de pilotes, para proteger las embarcaciones pesqueras y deportivas del tráfico de los dos grandes barcos de línea regular que unen Lanzarote y Fuerteventura.
La intervención, que tienen un coste de 480.000 euros, no supone la ampliación de la capacidad de atraque del puerto, pero sí garantiza la seguridad de las embarcaciones y de la propia instalación portuaria, según informó a La Voz, Rafael González, jefe de Explotación del Área de Puertos de la Consejería.
La reordenación del puerto descarta el traslado provisional de algunas embarcaciones al puerto deportivo Marina Rubicón anunciado por el Gobierno de Canarias mientras se construyese la macro obra de ampliación del puerto sureño, que de momento ni siquiera cuenta con partida presupuestaria. El proyecto se encuentra todavía en fase de redacción.
Ante condiciones adversas
Un racha de viento fuerte, una parada repentina de máquinas u otra circunstancia eventual, en la actual situación del puerto, podría empujar los barcos comerciales hacia los atraques de las embarcaciones pequeñas y provocar accidentes, como ya sucedió en el pasado reciente con el fast ferry de la compañía Fred Olsen.
"Las defensas que se construyen no permitirían que los barcos comerciales se fuesen contra los pesqueros y deportivos. Tendría que ser una tragedia tremenda para que un barco de los grandes pudiera pasar hacia los pantalanes", dijo González, quien recordó los problemas de congestión y seguridad que padece el puerto de Playa Blanca.
El jefe de Explotación del Área de Puertos sostuvo que actualmente no existe ni un metro disponible para atracar, por tanto, la actuación del Gobierno lo que permite es el atraque seguro de todas las embarcaciones que lo hacen habitualmente en el puerto. "Los canales serán más estrictos, pero se eliminan todos los cabos sueltos y se deja una dársena absolutamente limpia de estorbos para la navegación", comentó Rafael González. El puerto tiene una capacidad de 132 atraques, contando a los barcos de Armas y Fred Olsen.
La opinión de los usuarios
El presidente de la Cofradía de Pescadores de Playa Blanca tachó de "chapuza" la intervención del Gobierno porque asegura que las embarcaciones quedarán apiñadas en un espacio demasiado reducido. Domingo Umpiérrez además reclamó mayor información del Ejecutivo sobre las intervenciones que se hagan en la instalación portuaria del sur.
La Voz también consultó la opinión del patrón de una de las embarcaciones que se dedica al paseo marítimo de turistas y expresó que los pilares de defensa más próximos a su línea de atraque, que aún no han sido instalados, dificultarán seriamente la maniobra de entrada del barco. Así, Andrés Pedro, patrón del Princesa Yaiza ( 25 metros de eslora) señaló que "cuando pongan los pilares que hacen falta y haya mucho viento, la situación se complicará porque hay otro barco delante".
