La capital de Lanzarote y los nucleos turísticos concentran la mayor parte de los vertidos de aguas residuales de tierra al mar, afectando incluso a las playas más populares de Lanzarote. Así se desprende del análisis de censo actualizado en el Sistema de Información Territorial de Canarias al que ha accedido La Voz. De ellos, Arrecife concentra casi cinco de cada diez vertidos que se producen en la isla, siendo el municipio más afectado.
A lo largo del pasado año, su playa más famosa, la de El Reducto, tuvo que cerrar al baño en varias ocasiones por los vertidos de aguas residuales. Además, el Charco de San Ginés ha estado en el centro de la polémica los últimos años por la aparición de toallitas en sus fondos y el mal olor de su agua.
Las Caletas y Puerto Naos
En la central térmica de Las Caletas, ya localizada en el municipio de Arrecife, hay tres puntos activos y otros tres censados, pero que no tienen actividad. La unión Eléctrica de Canarias Generación SAU, propiedad de Endesa, vierte al mar de forma legal aguas de refrigeración, oleaginosas tratadas de forma habitual y aguas de refrigeración, en un segundo punto.
En este mismo espacio, en la Punta de Los Vientos, Canal Gestión Lanzarote gestiona un punto de vertidos, titularidad del Consorcio Insular de Aguas, que tira sobre la línea de costa la salmuera procedente de tres desaladoras. Los otros tres puntos en el lugar no están activos.
A dos kilómetros de la central térmica de Punta Grande se localiza un cuarto punto de vertido activo, que vierte en situaciones de excedencia y emergencia el agua residual urbana tratada en la Estación de Bombeo de Aguas residuales de Agramar, en Puerto Naos. Este punto, gestionado por Canal Gestión Lanzarote y titularidad del Consorcio del Agua, continúa activo, pero no tiene autorización. Este vertido no autorizado se produce cerca de una zona de baño, la de la playa de La Arena y próximo a la línea de costa.
Cabe señalar que, como en este caso, todas las instalaciones gestionadas por la filial de Canal Isabel II de Madrid en Lanzarote son titularidad del Consorcio.
En la misma zona, se encuentra un vertido habitual de agua residual industrial procedente de tanques de acuicultura, propiedad del Instituto Politécnico de Formación Profesional Marítimo Pesquero de Canarias y gestionado por la Viceconsejería de Pesca. Este vertido está autorizado y se produce sobre el puerto.
Tres puntos de vertidos en San Ginés
En menos de 300 metros en línea recta, el Charco de San Ginés tiene tres puntos de vertidos de aguas residuales no autorizados. Propiedad del Consorcio Insular de Aguas y gestionado por Canal Gestión, la encargada del ciclo integral del agua de la isla asegura que es el Consorcio el responsable de tener al día estas autorizaciones.
El primero de estos tres puntos está instalado sobre el dominio público marítimo terrestre y vierte en situaciones de excedencia o emergencia agua residual urbana procedente de la estación de bombeo de la Puntilla. En el mismo espacio, también se lanzan al mar las aguas residuales urbanas sobrantes de las estación de bombeo de aguas residuales de Barquillo y de Alcorde.
El Ayuntamiento de Arrecife exigió al Consorcio del Agua de Lanzarote y a Canal Gestión Lanzarote que regularizada de forma "urgente" los puntos detectados en el citado informe.
El Casino y El Reducto
A poco más de medio kilómetro del charco de San Ginés, también se vierten al mar aguas residuales urbanas procedentes de la red de saneamiento en una estación de bombeo localizada junto al Casino-Real Club Náutico de Arrecife. Este punto, propiedad del Consorcio y, por tanto, gestionado por Canal Gestión, vierte al mar sin autorización en situaciones de saturación de la red. Esta zona es un espacio habitual de baño en la ciudad y también se practican en ella deportes acuáticos y torneos.
La playa más popular de Arrecife, la de El Reducto, tiene muy cerca dos puntos de vertidos no autorizados que vierten al mar en situaciones de emergencia las aguas residuales sobrantes de dos estaciones de bombeo de aguas residuales, las de Portugal y Las Buganvillas, y también las procedentes de la red de saneamiento. Localizado en la Punta del Camello este punto sirve como aliviadero y está gestionado por Canal Gestión.
El Cable y La Concha
Los últimos puntos de vertidos censados en la capital de Lanzarote, tampoco tienen autorización. El primero, se produce sobre callaos y rocas en la playa de El Cable, mientras que el segundo lo hace la parte alta de la playa de La Concha, bajo el paseo marítimo.
Ambos en manos de Canal Gestión, estas conducciones no autorizadas echan al mar las aguas residuales procedentes de la red de saneamiento de esta zona en situaciones de emergencia y excedencia.
A lo que se suma el agravante de que en el caso de la playa de La Concha, pegada a Playa Honda, el vertido afecta a una zona de especial conservación, la de los Sebadales de Guasimeta y a la propia playa.










