Año tras año observo como los fondos donde pesco desde que era un niño se van empobreciendo cada vez más y cada vez más deprisa. Donde antes pescaba con mi padre y hacíamos los asaderos con la familia, ahora solo veo ...
Año tras año observo como los fondos donde pesco desde que era un niño se
van empobreciendo cada vez más y cada vez más deprisa. Donde antes pescaba con mi padre y hacíamos los asaderos con la familia, ahora solo veo desiertos de roca blanquecina y carentes de toda vida que no sean las famosas erizas y fulas negras.
La sobreexplotación de los escasos recursos pesqueros de nuestro archipiélago, por parte de pescadores profesionales, que ávidos de mejorar su economía, no escatiman en usar cualquier arte ahueque prohibido, no se dan cuenta de que están acabando con los escasos peces que existen en la plataforma marina.
Cualquier persona que desee mejorar su economía buscará la posibilidad de añadir horas extra a su horario laboral, o intentará un pluriempleo. Sin embargo, ellos, los pescadores "profesionales multiplican sus beneficios a base de pescar más, consiguiendo el efecto a
medio y corto plazo de esquilmar los fondos paratoda vida". Es la famosa frase de "pan para hoy y hambre para mañana".
El mañana ya está aquí, y está aquí en forma de fondos deshabitados, de enormes blanquizales desiertos. Cuando comentas con alguien o simplemente ves las noticias,
queda clarísimo quienes son los culpables de la falta de vida marina, pero son estos mismos culpables quienes con el afán de distraer la opinión pública yde desviar hacia sí las innumerables subvenciones que el propio gobierno les concede paraseguir faenando, con , cada vez más y mejores barcos y sistemas de detección y rastreo de capturas, no dudan en echar al colectivo de pescadores deportivos, toda la culpa de la falta de peces en nuestras aguas.
La disminución de recursos pesqueros en relación con otros años es de un60% menos tomando como baremo la pesca que había hace tan sólo 15 años. ¿Cómo se le puede acusar al un colectivo de deportistas de hacer del mar canario y sus fondos casi un desierto de vida?
El pescador submarino que practica su deporte en cualquiera de las islas del archipiélago, como mucho y en contados individuos bien preparados, tan sólo puede pescar hasta unos 30 metros de profundidad, siempre y cuando exista una plataforma marina que esté formada por rocas. Así, en un fondo arenoso este deporte es del todo impracticable, o cuanto menos aburridísimo, además hemos de poner las condiciones de la mar y el clima, que en muchísimas ocasiones hecha por tierra las ilusiones de salir a practicar este deporte.
También se ha de tener en cuenta que la pesca submarina no se puede practicar con una edad avanzada, pues es indispensable la buena preparación física del deportista, circunstancia que se va perdiendo imparablemente con el devenir de los años. También
añadiremos a estos impedimentos, las zonas en las que está permitida la pesca submarina, zonas éstas, en su mayoría, de un nivel de vida marina muy bajo, o con arenales en casi su total extensión la prohibición de capturar más de cinco kilos de pescado por pescador y día, el hecho de que el deportista solo actúa en el mar los días que su trabajo, familia y demás obligaciones se lo permiten.
Sumando todos estas trabas y escollos que se deben superar para poder practicar unas horas de este deporte, salta a la vista que es del todo imposible aún queriendo, el ser los
culpables de la falta de pescado en las costas del Archipiélago Canario.
Pero, a pesar de todo esto, es el colectivo de pescadores profesionales, capitaneados desde sus respectivas Cofradías, o Cooperativas, los que día tras día se afanan en echarnos la culpa de la falta de peces y de decir que " los deportivos le quitamos el pan de su familia".
Y yo les digo desde estas líneas, que somos los ciudadanos y deportistas, quien con nuestros impuestos pagamos sus subvenciones, sus instalaciones y hasta pagamos a precio de oro sus capturas en los mercados. Que no somos los pescadores submarinos los que acabamos con los peces que están más allá de los 30 metros de profundidad, y tampoco acabamos con las sardinas, ni los longorones, ni con las brecas, ni con un sin fin de especies que no forman ni formaban parte de las capturas de cualquier pescador.
Ni tan siquiera añadiendo a la lista los pescadores que de forma " ilegal ", puedan practicar este deporte, se podría comparar ni alcanzar el nivel de capturas y la zona marítima que son capaces de dañar los pescadores mal llamados profesionales.
También está en contra del deportivo la circunstancia de cumplir años, ya que esta circunstancia no se da en la pesca profesional, en donde los pescadores salen a la mar incluso ya jubilados, con el argumento de que "es lo que han hecho durante toda su
vida", conservando artes y aparejos en activo y contribuyendo a la falta de pesca en todo el litoral. ¿Es que yo sólo veo a los jubilados seguir saliendo a faenar con sus barquillos de lista 3ª?
Podría seguir enumerando una larga lista de acciones y elementos que dejan claro que no es el colectivo de pescadores deportivos de cualquier modalidad, los que acabamos con la vida marina de Canarias, y mucho menos los pescadores submarinos responsables, que practicamos una pesca de las más selectivas que se conocen. En este deporte, primero se busca, se selecciona y luego con buena suerte y preparación se captura la pieza. Ésta nunca será pequeña, pues carece de mérito alguno para el pescador submarino el capturar un pez que por su tamaño o dificultad al capturado no te aporta la mayor de las satisfacciones por la que practicamos muchos este maravilloso deporte.
