Estudiantes Pre-Parados y encerrados

Por Manuel García Con nuestros impuestos llenamos las arcas autonómica y estatal. Posteriormente, estos entes reparten tales recursos en diversas ayudas sociales y servicios públicos (educación, sanidad, vivienda?). La idea es conseguir una ...

1 de junio de 2012 (15:37 CET)
Por Manuel García
Con nuestros impuestos llenamos las arcas autonómica y estatal. Posteriormente, estos entes reparten tales recursos en diversas ayudas sociales y servicios públicos (educación, sanidad, vivienda?). La idea es conseguir una ...

Con nuestros impuestos llenamos las arcas autonómica y estatal. Posteriormente, estos entes reparten tales recursos en diversas ayudas sociales y servicios públicos (educación, sanidad, vivienda?).

La idea es conseguir una redistribución solidaria que pueda materializar el llamado Estado del Bienestar. Este flujo idílico de capital tiene sus puntos negros. Así, la corrupción política supone una sangría que, al fin y al cabo, afecta de lleno al gasto público mencionado. Aquí en Lanzarote, por ejemplo, las numerosas operaciones policiales contra la corrupción política han dejado como segundo escenario una sociedad con altos índices de pobreza. Además, otras fugas que nos alejan del pretendido Estado del Bienestar, son los pocos impuestos que pagan las rentas superiores, las grandes empresas y la banca.

Desde el pasado 22 de mayo, un grupo de estudiantes de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria se encuentran encerrados en la facultad de Geografía e Historia. Se hacen llamar "Estudiantes Pre-Parados". A pesar de jugárselo todo en los exámenes finales próximos, han decidido adoptar esta medida de presión. El recorte educativo de 3.000 millones de euros que el Gobierno firmó el sábado 21 de abril ha sido el desencadenante. El aumento del 25% en las tasas universitarias puede suponer en algunos casos hasta 600 euros adicionales.

Entiendo que es una medida desesperada, fruto de un profundo hastío ante tanta injusticia y desesperanza a la que se ven destinados. Lo triste es que ellos no han provocado la situación económica actual, lo triste es que quieran convertir a la educación pública en la cabeza de turco que deba pagar los excesos de otros. El Gobierno no ha tenido las agallas de exigirle más, por ejemplo, a gente como Aurelio Izquierdo, exdirectivo de Bankia que tenía previsto cobrar una indemnización de 14 millones de euros en pensiones y compromisos de prejubilación. Se ha ensañado con los que menos tienen.

Posiblemente esta acción de los estudiantes no lleve a nada y tengan que claudicar en sus demandas. Pero en cuestión de derechos sociales, sus logros han supuesto en muchos casos grandes sacrificios de gentes que nos precedieron. Por eso, está justificada la resistencia de estos universitarios a retroceder en uno básico como es el derecho a una educación pública de calidad; y su derrota, será nuestra derrota. En 1955, la costurera afroamericana Rosa Park, se negó a ceder su asiento en una guagua pública. Este simple gesto, ha traído como consecuencia que Estados Unidos tenga en la actualidad un presidente de color. O quizás estos chicos puedan hacer cambiar las cosas?

LO MAS LEÍDO