El laberinto de mayo

Que no va a haber mayorías absolutas en el Cabildo tras las próximas elecciones de mayo de 2007 es prácticamente un hecho, y ni siquiera hace falta echar mano de las encuestas para confirmarlo. Sin embargo, los sondeos sí ...

4 de noviembre de 2006 (02:33 CET)

Que no va a haber mayorías absolutas en el Cabildo tras las próximas elecciones de mayo de 2007 es prácticamente un hecho, y ni siquiera hace falta echar mano de las encuestas para confirmarlo. Sin embargo, los sondeos sí ...

Que no va a haber mayorías absolutas en el Cabildo tras las próximas elecciones de mayo de 2007 es prácticamente un hecho, y ni siquiera hace falta echar mano de las encuestas para confirmarlo. Sin embargo, los sondeos sí sirven para dibujarnos el panorama al que se puede llegar a enfrentar la isla después de esos comicios, y adivinar hasta qué punto va a ser o no complicado de resolver.

En concreto, la encuesta que esta semana publica La Voz de Lanzarote, realizada por el Instituto de Opinión Perfiles y encargada por el Partido Socialista, confirma una tendencia ya mostrada por otros sondeos, dando la victoria al Cabildo al PSOE, pero además aporta otras claves que, en realidad, son las que van a marcar la diferencia.

Porque en definitiva, al igual que por ejemplo ha sucedido en Cataluña, lo importante no es sólo quién gane, sino cómo queden el resto de los partidos y qué combinaciones se puedan hacer con los resultados en la mano. Y según esta encuesta, al Partido Socialista le bastaría con el apoyo de una sola fuerza para poder gobernar. Algo que, en la actual y fragmentada situación política de Lanzarote, no es poco.

Por el contrario, y siempre según este sondeo, arrebatar la Presidencia al PSOE no sería labor sencilla. Por un lado, porque al menos tres partidos se tendrían que poner de acuerdo para presentar una moción de censura a Manuel Fajardo. Por otro, porque precisamente entre algunos de esos partidos existen diferencias teóricamente irreconciliables.

En este escenario, sería prácticamente imposible reeditar un pacto nacionalista como el que se selló al inicio de la legislatura, entre Coalición Canaria y el PIL y con el apoyo del PP. Y es que aunque precisamente estas tres fuerzas podrían llegar a sumar el número necesario de consejeros, lo cierto es que actualmente parece imposible que los de Dimas Martín vayan a pactar de nuevo con CC después de la experiencia vivida en esta legislatura. Sobre todo porque, además, supondría pactar con aquellos que han abandonado sus filas para integrarse en Coalición Canaria, y que además les han expulsado de los Grupos de Gobierno del Cabildo, Arrecife y Teguise.

Así, si se descartara esta opción de un pacto entre las que serían la segunda y la tercera fuerza, el panorama se complicaría aún más para desbancar al PSOE. Y es que sería necesario contar con Alternativa Ciudadana, que hasta el momento no ha querido entrar en la política de pactos y que, en caso de hacerlo tras estas elecciones, parece poco probable que lo haga junto al PP y al PIL, o incluso junto al PP y Coalición Canaria, que sería la otra opción. Además, para una y otra fórmula, y especialmente para la segunda, los números estarían más apretados, según esta encuesta.

Por todo ello, y con la debida distancia que hay que tomar de los sondeos preelectorales, los datos serían doblemente favorables para el PSOE, porque no sólo ganaría las elecciones, sino que además sería muy difícil arrebatarle la Presidencia. Evidentemente, aún todo puede pasar, porque el tiempo de alianzas siempre depara sorpresas, y sobre todo porque las encuestas tienen el valor que tienen, y más cuando aún se desconoce cuáles serán los candidatos de algunos de los partidos que se medirán en las urnas. Pero con estas cifras en la mano, los pactos que aparecerían como más lógicos son sólo dos: el viejo y conocido PSOE-PIL, o el actual PSOE-CC. Y aunque ni una ni otra alianza han sido un camino de rosas, los socialistas tendrían que decantarse por una de esas dos opciones, a no ser que quieran optar por el arriesgado camino de un tripartito que debería incluir al Partido Popular y a Alternativa Ciudadana.

Aunque por ahora, todo son hipótesis e incógnitas en un panorama político más que complicado, en el que la última palabra no la tendrán los ciudadanos con sus votos, sino la política de pactos que impere después del 27 de mayo.

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