El sistema público de salud español es de los mejores del mundo, pero lo cierto es que no deja de tener sus inconvenientes, más si cabe después de toda la situación que vivimos con la pandemia.
Es por eso por lo que muchas personas buscan un hospital en Tenerife o en su ciudad, de titularidad privada, con la idea de que los atiendan antes. Aquí es donde les surge la duda de si pueden ir a pesar de no tener un seguro médico.
Los hospitales privados atienden a cualquier particular
La respuesta es que sí, pues los hospitales privados atienden a cualquier persona aunque no tenga un seguro médico, siempre sabiendo que habrá que pagar por los tratamientos, consultas, la hospitalización, pruebas, etc.
De hecho, hay algunos centros privados que no trabajan con las aseguradoras, de manera que pasan un presupuesto al paciente con el fin de que este sepa lo que le va a costar el tratamiento que necesita, que elige si se lo hace allí, en otro hospital privado o en la sanidad pública.
También se puede ir a los centros de las aseguradoras
Aunque hay centros exclusivos de algunas aseguradoras, que suelen llevar el nombre de estas, la mayor parte de ellos trabajan con varias y ahí también nos pueden atender de forma particular, sin necesidad de que contratemos una póliza.
Solo tenemos que llamar para preguntar si nos atienden y si la respuesta es afirmativa, que es lo normal, nos pasarán un presupuesto con el fin de que lo aprobemos e ir a la consulta, hacernos unas pruebas o incluso operarnos.
Suelen ofrecer financiación
Los tratamientos médicos no son económicos, algo que saben y comprenden en estos centros y por eso suelen ofertar su propia financiación, para que el dinero no sea un impedimento a la hora de acceder a sus servicios.
Simplemente, hay que preguntar en admisión y ahí nos informan de todos los pasos que hay que dar a fin de poder pagar en cómodos plazos durante el tiempo que nosotros estipulemos.
Siempre es mejor contar con un seguro médico
Lo ideal en estos casos es contar con un seguro privado, ya que así la factura baja de manera considerable. Existen varias modalidades, como los que tienen copago, sin él, los ambulatorios, los de hospitalización, etc., de modo que vamos a poder optar por aquel que mejor se adapte a lo que necesitamos.
Sin más, con uno ambulatorio con copago que quizá es el más económico, ahorraremos una gran cantidad de dinero, pues habrá consultas que no nos van a cobrar, pruebas sencillas que entrarán en la póliza y si hay que pagar nos devolverán o descontarán una buena cantidad.
Todos podemos ir a un hospital privado abonando sus servicios. Si no nos es posible hacer frente al coste en ese momento, casi siempre nos van a dar financiación a medida, aunque en estos casos lo mejor es pagar un seguro privado con el cual ahorraremos mucho dinero y no tendremos que esperar para que nos diagnostiquen.