Al menos seis empresas de Lanzarote, entre ellas imprentas, agencias de publicidad y carpinterías, han denunciado ante la Policía Nacional y ante la Guardia Civil haber sido víctimas de una estafa con un sistema de afilado de herramientas por parte de una misma persona. Los afectados afirman llegaron a pagar cifras que oscilan entre los 157 y los 1.800 euros, sumando un total de 4.800 euros lo abonado entre todos. Una de las denuncias ya está en manos del Juzgado de Instrucción número 1 de Arrecife, que ha abierto diligencias.
La Voz de Lanzarote ha tenido acceso a dos de las denuncias, una presentada por una imprenta de publicidad de Arrecife y otra por una agencia de publicidad y rotulismo también ubicada en la capital. A la presentada por esta última empresa se han incorporado además firmas de otros cinco afectados, entre los que figuran otras imprentas y también carpinterías.
En todos los casos, los denunciantes afirman haber sido estafados por un hombre, de iniciales H.P., que les ofreció "un servicio de afilado láser de cuchillas y herramientas con posterior tratamiento PVD de titanio" para "endurecer" las mismas y "alargar su vida útil en más de 50 veces". Según aseguran, éste les llegó a cobrar diferentes cantidades de dinero sin realizar "ningún tipo de tratamiento", llegándoles además a "amenazar".
Reclamó el pago de 2.400 euros a uno de los afectados
Con respecto a la denuncia presentada por una agencia de publicidad ante la Guardia Civil, se señala en la misma que H.P. acudió a la empresa el pasado 17 de enero y que "como prueba de la eficacia del tratamiento" que ofrecía, "realizó una prueba con una tijera", cortando con ella "una chapa". Tras ello, el denunciante quedó con este hombre en su domicilio particular y le entregó "varias herramientas nuevas o recién afiladas para recibir únicamente un presupuesto para a realización del tratamiento de PVD de titanio". "Me explicó que debía realizar unas pruebas de material para saber si se podía proceder con el tratamiento y yo le dije que hiciera las pruebas y me pasara un presupuesto acorde al volumen del trabajo en cuanto lo tenga todo analizado", hace constar en la denuncia.
Sin embargo, el 20 de enero, H.P. se presentó en el domicilio del denunciante alegando que su padre había tenido "un accidente junto con niños, que está hospitalizado y que tiene que cobrar y marcharse urgentemente a Las Palmas". El importe que quería cobrar, según la victima, eran 2.400 euros. "Le dije que no le di orden de trabajo y que estaba preparado a pagar un par de cien euros, pero no tanto", apunta en la denuncia el gerente de la agencia de publicidad, que añade que, ante ello, H.P. rebajó el importe "a 1.800". "Le di 410 euros que tenía en ese momento y me convenció a acompañarme al cajero para sacar otros 600. Le comenté que de momento no podía pagar más, pero que si el trabajo estaba bien, en un par de semanas se lo pagaba o bien le realizaba trabajos a cambio", relata.
Dos días más tarde, el denunciante tuvo "ocho o nueve llamadas perdidas" de H.P., quien el 23 de enero volvió a presentarse en la casa del denunciante "solicitando el pago restante". "Le repetí que no podía hacer frente al pago, pero que con mucho gusto le hacía trabajos a cambio y me encargó diseño e impresión de facturas y tarjetas", afirma en la denuncia, a la que adjunta las facturas de dichos trabajos.
Grabaciones de la presunta estafa en audio y vídeo
En los siguientes días, el gerente de esta empresa de publicidad hizo pruebas con las herramientas recibidas comprobando que se mellaron "enseguida", por lo que "sospechando que el tratamiento de titanio no se había realizado correctamente", se puso a investigar "en páginas de Internet de empresas que se dedican al recubrimiento PVD", descubriendo que resultaba "evidente que no se había realizado ningún tratamiento". Según el denunciante, las herramientas sólo tenían un "recubrimiento", que se podía "quitar simplemente con la uña".
"Con el fin de tener pruebas sobre la presunta estafa", el afectado volvío a reunirse con H.P. el 29 de enero, "con un supuesto cliente que presenció como testigo su oferta de tratamiento de titanio", una conversación que "está grabada en audio". Ese mismo día, le hizo entrega de "las facturas y tarjetas impresas" y H.P. le entregó la factura "por importe de 1.800 euros más IGIC por el tratamiento PVD de titanio".
El 14 de febrero, el denunciante se volvió a encontrar con H.P. en el Teleclub de Mácher "junto a otro supuesto cliente y su mujer", un encuentro que también fue "grabado en audio y video". "Tras realizar su presentación en la cual nuevamente ofreció el recubrimiento de titanio, le comenté que el cliente no era un cliente, sino un testigo, y que el tratamiento ofrecido y cobrado no se ha realizado", apunta el afectado en la denuncia, en la que señala que "después de una larga conversación" en la que le hizo notar que estaban "en un lugar público con cámaras de vigilancia, él accedió a devolver el dinero cobrado", 1.010 euros por el supuesto tratamiento de titanio y 289,45 euros "por los trabajos recibidos como pago en especie", sumando "un total de 1.299,45 euros".
"Como él no tenía posibilidad de hacer frente al pago en ese mismo día, se acordó una entrega de herramientas en concepto de fianza", se indica en la denuncia, en la que se añade que, "por la tarde, en otro encuentro en Arrecife y bajó la supervisión de un testigo, entregó 10 disco de corte no afilados y de bajo valor redisual y firmó un documento en el cual reconoce la deuda y entrega las herramientas como fianza", documento que también se adjunta a la denuncia. Sin embargo, "el lunes 10 de febrero de 2018, fecha acordada para el pago y la devolución de la fianza, el señor H.P me comenta por teléfono que no le interesa proceder con los acordado, ya que no tengo pruebas de que me vendió un tratamiento de titanio", añade el afectado que, ante ello, acudió a la Guardia Civil a denunciar.
Presuntas amenazas
En la denuncia, el gerente de la empresa de publicidad también hace constar que recibió "amenazas" por parte de H.P. "Me dijo que preferia solucionar lo del pago restante entre nosotros porque es mejor que no venga su hermano", afirma el afectado, añadiendo que en otra ocasión le dijo que era "gitano y que tiene mucha familia en la isla".
Además, expone el caso de otros afectados, apuntando que "en el caso de un cliente que puede testificar, le comentó que su hermano es muy agresivo y que si no paga ahora, vendrá". En otro caso, añade, "le ha amenazado con un cuchillo, aunque no llegó a utilizarlo". Y es que, a esta denuncia, se ha añadido un listado de otros afectados "dispuestos a presentar una denuncia colectiva". En total, otras seis personas que aseguran haber sido estafadas por H.P. en distintas fechas desde 2015 hasta enero de 2018, entre las que se encuentra el propietario de una imprenta de publicidad que también ha denunciado los hechos, en este caso ante la Policía Nacional.
Una denuncia ya está siendo tramitada por el Juzgado
En esta segunda denuncia, el afectado hace constar igualmente que H.P. se visitó su empresa el pasado 17 de enero diciéndole que se dedicaba a realizar "un tratamiento de titanio llamado PVD-Titanio y afilado láser" al tipo de material con el que el denunciante trabaja. Como H.P. era "tan insistente", el propietario de esta empresa accedió a prestarle cierto material "para que le realizará una prueba sin coste alguno", quedando en que "posteriormente se reunirían para concretar presupuesto y decidir si llevan a cabo dicho tratamiento".
Sin embargo, según se señala en la denuncia, H.P. reapareció en la empresa al día siguiente "con el material que se había llevado, el cual hace entrega cubierto de una pintura negra" y exige al propietario "que le pague la cantidad de 900 euros". El denunciante afirma que le manifestó que no podía hacer frente a ese pago y que, además, no era al acuerdo al que habían llegado, comunicándole que "no va a proceder a pagarle porque habían hablado de un presupuesto previo".
"Como no me pagues, va a venir mi hermano, que no es tan amable como yo", señala que le espetó H.P., ante lo que se sintió "intimidado y atemorizado" porque creía "capaz" que H.P pudiera "cumplir sus amenazas, volver a la empresa y hacer daño" a sus trabajadores, por lo que procedió a pagarle "únicamente 350 euros" que el propietario le pidió "a un cliente" que se encontraba en ese mismo en el negocio para "así conseguir que se marchara de la empresa H.P.". Aún así, el denunciante afirma que le solicitó factura para "declarar el dinero" y que H.P. le manifestó "que se la traía en unos instantes, porque la tenía en el vehículo, abandonando el lugar con el dinero entregado y sin hacer entrega de la factura". En cuanto al "resto del dinero, hasta alcanzar los 900 euros", H.P. le dijo que "volvería a recogerlo dentro de seis meses, cuando haya probado el material y compruebe la efectividad del mismo".
Unos días después, el propietario de esta imprenta de publicidad se percató de que el material "no" había sido tratado "con ninún material especial para favorecer su durabilidad" y que "lo único" que se había hecho era "cubrirlo con una puntura negra para dar la impresión de que se ha manipulado". Así, afirma que se percató de que había "sido estafado y engañado" y se comunicó "telefónicamente" con H.P. "para solicitarle el dinero abonando, negándose H.P a tal extremo", refleja en la denuncia, en la que hace constar que tiene "miedo"de que H.P vuelva a su lugar de trabajo "y le exija más dinero o cometa cualquier locura".
Es esta denuncia la que, según ha podido saber La Voz, ya está siendo tramitada por el Juzgado de Instrucción número 1 de Arrecife. Según auto de fecha del 1 de marzo, el juez considera que los hechos denunciados podrían ser constitutivos de un delito leve de estafa y amenazas.
Recogida de firmas
Los afectados por esta "estafa del afilador H.P." como ellos mismos la han bautizado, han iniciado además una recogida de firmas a través de la plataforma change.org. para pedir a los ciudadanos, sean víctimas o no, que den su apoyo "si creen que las autoridades deben intervenir para parar este tipo de estafas" y, si son afectados, para que apoyen "la denuncia como testigo" o se sumen "a la denuncia colectiva". Para ello, han creado también una dirección de correo electrónico, que es afiladorestafa@gmail.com.