De los cuatro centros de buceo que el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil inspeccionó en Lanzarote, únicamente uno cumplía toda la normativa. De las inspecciones de los otros tres restantes se derivaron un total de 12 denuncias administrativas por sendas infracciones. Desde el GEAS señalan que, desde que comenzaron este año a realizar estas actuaciones en las islas no capitalinas, han comprobado que hay "muchas irregularidades, especialmente en Lanzarote".
Las 14 inspecciones que los miembros del GEAS han realizado en Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote, en coordinación con la Viceconsejería de Pesca del Gobierno de Canarias y la delegación en Canarias del Ministerio de Industria, dieron lugar a un total de 28 denuncias, de las que 12 fueron en Lanzarote. Todas las inspecciones en la isla se realizaron de oficio, sin partir de una denuncia previa.
Entre las infracciones, el GEAS encontró tres compresores en dos centros de buceo de Lanzarote que no habían pasado la "correspondiente inspección del Organismo Certificador Autorizado" y que han sido precintados. Los equipos, que se utilizan para llenar las botellas de aire comprimido, continuarán con el precinto hasta que pasen la correspondiente inspección y obtengan la certificación necesaria. Sin embargo, ésta no fue la única infracción que los agentes detectaron en la isla.
En el caso de un centro de buceo ubicado en el municipio de Yaiza, además de precintar dos compresores, la Guardia Civil halló otras 5 infracciones, que se tradujeron en 5 denuncias administrativas. En otro centro de Costa Teguise, el GEAS precintó el tercer compresor y encontró, además, otras 6 infracciones que supusieron las respectivas denuncias administrativas. En un tercer centro, también en Costa Teguise, encontraron otra infracción, que le costó al centro una denuncia administrativa.
Desde la Guardia Civil señalan que, en general, la mayoría de las infracciones halladas en la provincia fueron por "incumplimiento de diversas normas de seguridad como realizar actividades de submarinismo con material inadecuado o la falta de personal para completar el equipo mínimo de buceo". Estas infracciones pueden conllevar multas de hasta 3.000 euros las infracciones leves, o desde 90.000 euros a 600.000 euros en el caso de las más graves.
