El Consorcio de Emergencias y Seguridad de Lanzarote ha confirmado que la mancha detectada este domingo en la playa de Matagorda, que motivó el cierre preventivo de la zona de baño, no se corresponde con un vertido de origen contaminante. Los análisis han determinado que se trata de una acumulación de microalgas en proceso de descomposición.
La presencia de esta mancha, de tamaño considerable, llevó a socorristas y a una embarcación de la ONG Emerlan a izar la bandera roja y desalojar el agua por precaución. En un primer momento, se sospechó que pudiera tratarse de un derrame de hidrocarburos o aguas residuales, lo que activó el protocolo de seguridad.
Aunque el fenómeno es de origen natural y no implica el mismo riesgo que un vertido químico, las microalgas en descomposición pueden producir mal olor y alterar el aspecto del agua. El cierre preventivo se mantiene mientras las autoridades evalúan la evolución de la mancha y las condiciones para el baño.
Este tipo de acumulaciones son más comunes en épocas de calor, cuando el aumento de la temperatura y la calma del mar favorecen la proliferación de algas y su posterior descomposición. Las autoridades recuerdan que cualquier cambio inusual en el mar debe comunicarse de inmediato a los servicios de emergencia.









