El famoso escritor Eduardo Mendoza, uno de los escritores contemporáneos más singulares del panorama nacional, visitará Lanzarote el próximo jueves para asistir al espacio "El autor y su obra", que organiza la Fundación César Manrique y que tendrá lugar a las 20:30 horas en la sede sita en Taro de Tahíche.
En estos encuentros ya se ha contado con la presencia de autores de la talla de José Saramago, Alberto Campo Baeza, Eduardo Souto de Moura, Carmen Martín Gaite, José Ángel Valente, Susan Sontag, Juan Goytisolo, Eduardo Haro Tecglen, Eduardo Galeano o el Premio Nobel Günter Grass, entre otros.
Genio y autor
EduardoMendozanació en 1943 en Barcelona, donde cursó todos susestudios. Después de licenciarse en Derecho, estudió sociología en Londres y trabajó como abogado en varias empresas y más tarde como traductor e intérprete en las Naciones Unidas y en diversos organismos internacionales.
En 1975 publicó su primera novela, La verdad sobre el caso Savolta, con la editorial Seix Barral, a la que ha seguido siendo fiel hasta el día de hoy. Otras novelas suyas son: El misterio de la cripta embrujada, La ciudad de los prodigios, Sin noticias de Gurb y Una comedia ligera, hasta la más reciente, El asombroso viaje de Pomponio Flato, aparecida este mismo año. También ha escrito obras de teatro, en catalán, y ha hecho traducciones al castellano y al catalán.
Desde 1988, se dedica de forma exclusiva a la literatura, exceptuando un periodo en que impartió clases de interpretación en la universidad Pompeu i Fabra de Barcelona, así como también ha realizado varias colaboraciones como columnista en el diario El País.
Durante su intervención, Eduardo Mendoza explorará las claves de su obra. En sus propias palabras, "a estas alturas, cuando me preguntan cuál es el autor que más ha influido en mi obra, me veo obligado a contestar que yo mismo. Cada libro es hijo del anterior y padre del siguiente, sin que en esta evolución falten las adaptaciones al medio y los saltos mendelianos".
Según el autor, "sin entrar en un análisis detallado de cada libro, que sería tedioso e ineficaz, porque esta labor corresponde al crítico y, con más derecho, a cada lector, haré un repaso de mis sucesivos proyectos y realizaciones, sin pasar por alto los fracasos y descarrilamientos, con algunas reflexiones al margen".
