Las asociaciones ecologistas WWF España y SEO/BirdLife junto a la Fundación César Manrique e investigadores de la Estación Biológica de Doñana han pedido que se evite el uso turístico del Faro de Alegranza. La alerta ha saltado tras conocer que se van a realizar de forma inminente obras de rehabilitación en este faro, ubicado dentro del Parque Natural del Archipiélago de Chinijo. Estos colectivos temen que este lugar acabe convirtiéndose en un centro turístico, "con la consiguiente amenaza sobre el espacio natural y su biodiversidad".
Con el objetivo de evitar que la rehabilitación del faro sea el "preludio de la destrucción de la isla de Alegranza", estos colectivos han solicitado por carta al Consejo de la Autoridad Portuaria que garantice en estas instalaciones "el uso público destinado a la conservación de los valores naturales del espacio", tal y como recoge el Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) del Parque Natural del Archipiélago Chinijo, y que "en ningún caso se dedique al uso turístico".
Estos colectivos han insistido en que el PRUG "controla y restringe el uso público" y recoge la necesidad de que las instalaciones del Faro de Alegranza alberguen una estación biológica que sirva de apoyo a las actuaciones de conservación del espacio. Así, han recordado que e Archipiélago Chinijo, formado por la isla de La Graciosa, los islotes de Alegranza y Montaña Clara, los Roques del Este y del Oeste, y el Risco de Famara al norte de Lanzarote, es el espacio natural protegido marítimo-terrestre "más importante de las islas Canarias".
"Sus aguas albergan la mayor biodiversidad marina. Su vegetación se encuentra entre las primeras de Europa en cuanto a la presencia de especies endémicas. Además, es el refugio de las poblaciones más importantes de aves marinas, la mayor diversidad de rapaces y el mayor número de especies amenazadas de aves de las islas Canarias", han defendido.
Aumento "indiscriminado" de visitantes
Al mismo tiempo, cabe destacar que dicho Islote se encuentra incluido en la Red Natura 2000 como ZEPA ES0000040 "Islotes del norte de Lanzarote y Famara" y como Lugar de Importancia Comunitaria. También ha sido declarado como área de Sensibilidad Ecológica y es Reserva de la Biosfera por la UNESCO desde 1993.
Por último, estas asociaciones ecologistas, miembros de la FCM e investigadores han advertido que "un aumento indiscriminado de visitantes y la realización de actividades de tipo turístico en lugares tan importantes y sensibles como éste, pueden comprometer seriamente la viabilidad y conservación de este espacio a medio y largo plazo".