La Confederación Nacional del Trabajo (CNT) ha denunciado una agresión a la presidenta de Las Kellys, Myriam Barros, que el pasado jueves se desplazó desde Lanzarote hasta la localidad majorera de Corralejo para participar en una protesta a las puertas del hotel Mirador de Lobos. "La compañera sufrió un duro golpe a modo de puñetazo mientras se encontraba frente a la garita de seguridad, siendo el guardia de seguridad del hotel quien le propinó el golpe desde dentro de la garita", aseguran desde el sindicato.
Según explican, "por suerte la compañera no sufrió mayor percance, pero el incidente fue denunciado ante las autoridades que se personaron, e hicieron saber al mencionado guardia que la acción emprendida por su parte era constitutiva de delito". Ante estos hechos, desde CNT han mostrado su apoyo a Myriam Barros y también su "repulsa hacia estos actos antisindicales que practica la empresa". Y es que creen que "este incidente es una muestra más de la presión que ejerce la empresa hacia los trabajadores", a quienes "se intenta aleccionar para cometer actos de vil esquirolaje".
"Decimos esto último", agrega el sindicato, "porque la empresa además preparó una nota informativa para los clientes alertando de nuestra presencia en las cercanías del hotel, en la que se nos acusaba de comunistas, sensacionalistas y de haber sido despedidos por conductas inapropiadas".
En la protesta, según la CNT, participaron "casi una treintena de trabajadoras y trabajadores", para reclamar el pago de salarios, la readmisión de compañeras despedidas en lo que consideran un "ERE ilegal" y la no externalización de los puestos de camarera de pisos a través de la ETT 'Emplea'.
Entre los manifestantes se encontraban representantes del colectivo de Las Kellys en Fuerteventura y Lanzarote, a las que el sindicato ha querido agradecer "su esfuerzo", ya que sostienen que "ésta es una lucha en el sector de la hostelería de solidaridad, horizontal y de acción directa".
