El Comité Local de Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-BC) en el municipio de Arrecife ha mostrado su compromiso por "buscar soluciones reales" al problema habitacional de la capital conejera, donde destaca que la situación "está descontrolada".
Así, reclaman al grupo de gobierno conservador, formado por el Partido Popular (PP) y Coalición Canaria (CC), iniciar el procedimiento para declarar las zonas tensionadas de la capital para, posteriormente, elevar una solicitud al Gobierno de Canarias que es el que finalmente debe aprobarla.
Sheila Guillén, portavoz de NC-BC en Arrecife, expone que “Lanzarote y especialmente Arrecife están viviendo una situación de descontrol en los precios de los alquileres que, en determinados casos, llegan a superar los 900 y 1.000 euros por 50 o 60 metros cuadrados”. Esta situación, prosigue la canarista, “se agrava por el hecho de que prácticamente no existe oferta de alquiler disponible, lo que provoca que el mercado regule al alza”.
Para los canaristas, la declaración de “zonas tensionadas” que prevé la ley estatal de vivienda frenaría, en parte, el “descontrol” de precios de los alquileres que está sufriendo las islas, donde este mes de febrero han vuelto a aumentar en un 11%.
“La realidad es sangrante para toda la población insular, pero especialmente, para los jóvenes que desean emanciparse y proyectar un hogar. Existen jóvenes con trabajos estables que viven en casa de sus padres o comparten casa con dos o tres personas más”, señala Guillén, que también recuerda el “elevado paro juvenil existente en Canarias y Lanzarote que hace imposible programar un proyecto de vida fuera del núcleo familiar”.
Con todo, desde NC-BC reclaman al grupo de gobierno de Arrecife a afrontar decididamente el “drama habitacional” que padece la capital, buscando todas las medidas y posibilidades legales y políticas a su alcance.
“En la actualidad no existe mayor problema en Arrecife y Lanzarote que el acceso a una vivienda. Los esfuerzos deben ir dirigidos a paliar esta situación, cada uno en su ámbito de actuación, pero con determinación. El ayuntamiento de Arrecife no puede ser un sujeto pasivo que se desentienda de sus verdaderas responsabilidades”, sentencia Sheila Guillén.