"Assalama" ha estado a punto de quedarse en tierra. El barco de Naviera Armas que estrenaba este lunes la nueva ruta entre Canarias y Marruecos ha salido en su segundo viaje desde la isla majorera, con casi un día de retraso. Una demora que ha puesto de manifiesto las "deficiencias" de personal e instalaciones del muelle de Puerto del Rosario, según la consejera de Transportes del Cabildo de Fuerteventura, Ana Padilla, porque se han superado las previsiones de funcionamiento hechas para un Puerto Schengen. Y es que la compañía asegura quela demanda de plazas para esta próxima semana está en torno a 1.500 pasajeros.
Personal de la compañía marítima en Puerto del Rosario ha confirmado que "no está dando tiempo a que se tramite la documentación en la aduana". Este miércoles, llegaba a Fuerteventura el barco procedente de Tarfaya y estaba previsto que partiera de nuevo hacia la localidad marroquí a la 13.30, pero los retrasos impidieron que los pasajeros embarcaran y hasta las siete de la mañana de este jueves el barco no ha podido emprender la ruta hacia Marruecos.
Naviera Armas ya había dado orden a su sede en Puerto del Rosario para que se suspendiera la línea hasta un nuevo pronunciamiento de la dirección, pero la intervención del Cabildo de Fuerteventura, que ha mantenido contactos con el Gobierno de Canarias, la Delegación de Gobierno, la Autoridad Portuaria y la propia compañía, ha permitido llegar a un acuerdo, de momento temporal, ya que se reconoce que es necesario llevar a cabo una adecuación del muelle. "Habilitar una segunda línea de control de pasajeros y trasladar a la carpa el control de aduana, junto con un área más amplia para el control de vehículos, de forma que no sea necesario estar trasladando a los viajeros que llegan de un lugar a otro para pasar los distintos controles", ha reconocido el Cabildo.
De momento, se han variado los días de salida y llegada para evitar que coincida el embarco y desembarco. A partir del domingo la línea saldrá de Fuerteventura los domingos, miércoles y viernes por la tarde, a una hora que permita a los viajeros y vehículos poder luego conectar con Gran Canaria y Lanzarote. Mientras que las salidas desde Tarfaya serán por la mañana de los lunes, jueves y sábados. "No es la solución definitiva, pero entiendo que de esta manera garantizamos el funcionamiento del servicio", ha explicado el presidente del Cabildo de Fuerteventura, Mario Cabrera.
Lanzarote, ¿próxima parada?
El consejero de Transportes del Cabildo de Lanzarote, Ramón Bermúdez, lamenta esta situación pero cree que sólo es imputable a los responsables públicos y pide también el compromiso de Madrid para que dote de personal necesario a este tipo de infraestructuras. Confía en que de los "errores" se aprende y que esto va a servir para que Lanzarote se prepare de cara a ser parada en la ruta con Tarfaya."El compromiso que obtuvimos es que el barco pasará por Lanzarote cuando esté plenamente operativo y se consolide la línea", ha confirmado Ramón Bermúnez.
