La delegada del Gobierno en Canarias, Mercedes Roldós, se ha comprometido "a adoptar cuantas medidas sean necesarias por parte de la Delegación del Gobierno en Canarias, la Dirección Insular de la Administración General del Estado y Tráfico para que el Ironman siga celebrándose en Lanzarote". Así lo ha comunicado el Cabildo a través de su presidente, Pedro San Ginés, que abordó este tema con Roldós.
Igualmente, la Delegación del Gobierno ha informado a la Corporación Insular de la convocatoria de una reunión de coordinación de este evento deportivo, prevista para el próximo viernes 7 de abril. Entre los participantes habrá representantes de la Delegación, la Dirección Insular, Tráfico, el Consorcio de Seguridad y Emergencias y el Área de Deportes. Esta reunión tiene como fin "encontrar soluciones para salvar esta situación y garantizar que las carreteras por donde transite el Ironman mantengan al menos uno de sus carriles abiertos al tráfico", según se explica en el comunicado.
Mercedes Roldós ha solicitado a la institución presidida por San Ginés una "mayor implicación y esfuerzo en la organización del evento, aportando una mayor dotación de recursos humanos y material de señalética como conos, cintas, etcétera, para garantizar la seguridad de los deportistas, del público y de la circulación", ha precisado el Cabildo.
Preocupación por la posibilidad del cierre de carreteras
La delegada del Gobierno en Canarias responde de este modo a la preocupación manifestada por la consejera insular de Deportes, Patricia Pérez, después de que "Tráfico planteara el cierre integral de las carreteras de la isla como condición para celebrar el próximo Ironman". Es por ello que San Ginés se dirigió a Roldós para expresarle su inquietud por "el peligro de suspensión y posible pérdida para la isla de esta prueba, al proponerse además rutas alternativas incompatibles con su celebración".
El presidente del Cabildo ha destacado "la celeridad y diligencia con la que Mercedes Roldós atendió la llamada" y ha asegurado que la delegada "compartió su preocupación al ser consciente de la importancia de esta prueba como buque insignia de la estrategia del Cabildo para consolidar la isla como destino turístico-deportivo".
