El Gobierno de Canarias ha propuesto una "reunión técnica con todos los agentes económicos implicados en la actuación" de la Avenida Marítima de la capital lanzaroteña "para buscar una solución técnica más adecuada en este momento para el sector comercial de Arrecife, recuperando el consenso, en la medida de lo posible". Así lo ha comunicado la directora general de Comercio y Consumo del Ejecutivo canario, María Ángeles Palmero Díaz, en un escrito para responder a una solicitud del presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, quien le pidió que aclarase "las consecuencias de las medidas de tráfico adoptadas por el Ayuntamiento de Arrecife en la Zona Comercial Abierta" de la capital.
La Dirección de Comercio y Consumo considera "necesaria y urgente" la reunión y señala que deberían estar presentes representantes de "asociaciones de comerciantes, el Ayuntamiento de Arrecife, el Cabildo de Lanzarote y el Gobierno de Canarias". Un encuentro que, según María Ángeles Palmero, sería "para evitar proceder a iniciar un procedimiento de incumplimiento del Plan Director Zonal de Arrecife e Insular de Zonas Comerciales Abiertas de Lanzarote" y también eludir "el correspondiente expediente de reintegro de las cantidades aplicadas a este proyecto de inversión por el Cabildo de Lanzarote y el Gobierno de Canarias".
La directora general de Comercio, que ya trasladó el parecer del Ejecutivo al Ayuntamiento de Arrecife y al Cabildo a finales de junio, señala en este nuevo escrito que entienden que con el cierre de la Avenida al tráfico desde el Consistorio capitalino "se ha adoptado una medida desproporcionada y rompiendo con el consenso con el que se había trabajado hasta la fecha". "La solución del tráfico no era la más adecuada, dado que no estábamos al final del Plan Director", señala la directora general, añadiendo que las "restricciones de tráfico deberían ser progresivas conforme se van realizando las diferentes fases".
"Parece necesario analizar las causas y estudiar las alternativas"
"El objetivo principal de la obra no era restringir el tráfico, sino favorecer el comercio, tema que ahora no parece tenerse en cuenta en las medidas adoptadas", apunta Palmero. Así, afirma que "en este momento se vienen a confirmar nuestras previsiones y temores sobre la medida adoptada, constatado con la denuncia de los agentes económicos, que ponen de manifiesto los efectos negativos que la misma está suponiendo para el comercio de Arrecife".
Una situación que, según la directora, "pone en duda el uso adecuado de los recursos públicos invertidos en nombre del comercio y que, por tanto, puede derivar en un posible incumplimiento del convenio y de los fondos mal aplicados, poniendo en peligro los proyectos que están en curso en las Zonas Comerciales abiertas de la isla de Lanzarote, tanto en el marco del Fondo de Desarrollo de Canarias (FDCAN), como en otras iniciativas que dan financiación a proyectos de esta naturaleza". Cabe destacar que el plan de la Zona Comercial Abierta de Arrecife cuenta además con la cofinanciación del Fondo de Desarrollo Regional (FEDER).
Por todo ello, María Ángeles Palmero asegura en el escrito que "es evidente que se están produciendo una serie de disfunciones que están afectando en un deterioro del escaso comercio existente" y que, por tanto, "parece necesario analizar en profundidad las causas y estudiar las alternativas correctoras necesarias con la mayor agilidad posible y el mayor rigor técnico".