Aureliano Negrín fue el ganador de la Regata de San Ginés en la clase RI 2-3 y quiso dedicar la victoria a su padre, recientemente fallecido. Compitió a bordo del Muyay, en la prueba que tuvo lugar el viernes 24 de agosto. El ganador de la clase RI 0-1 fue, por su parte, Augusto Escolar, a los mandos del Marina Rubicón por segundo año consecutivo.
La regata tuvo su salida el viernes 24 a las 17:00 horas desde Las Palmas. Diez fueron los barcos que comenzaron la regata, y se enfrentaron a un recorrido en mar abierto de 111 millas. La prueba comenzó con un viento muy suave que se fue incrementando, llegando a puntas de unos 25 nudos durante la noche.
Además, la dirección del viento fue rolando hacia el este, lo que provocó que ninguno de los participantes pudiera entrar en el estrecho de la Bocaina, y que tuvieran que remontar parte de la costa oeste de Fuerteventura dando bordos de ceñida.
Tras pasar el control de tiempos establecido a la altura de Punta Limones, en Playa Blanca, las tripulaciones tuvieron que trabajar duro para sortear las encalmadas típicas de esa zona, que este año se presentaron más intensas de lo normal, y provocaron importantes cambios en las posiciones de cabeza.
Dos de los barcos participantes se vieron obligados a retirase de la regata. Por un lado, el XP 44 Felipeva, de Felipe del Rosario, tuvo que abandonar por rotura de su vela de proa, mientras que el Cantamañanas, de Matías Hernández, optó por no terminar la regata debido al importante retraso que sufría con respecto al resto de la flota.
La arribada a Arrecife se produjo de forma escalonada, a partir de las 12 del mediodía, cuando el Puerto Calero cruzó la línea de llegada en primera posición del tiempo real. El último barco en llegar fue el Altamar, que lo hizo casi a las 16.00 horas.
El mismo sábado por la noche, en las instalaciones del Real Club Náutico de Arrecife se llevó a cabo la ceremonia de entrega de premios, con presencia de varias autoridades civiles y militares. Durante esta celebración, se presentó en sociedad la nueva coral del club. Tras el acto, los asistentes disfrutaron de una fiesta en honor a los regatistas y desde la terraza del club se pudieron ver los fuegos artificiales que daban el colofón a las fiestas de San Ginés de este año.
