Es el sexto cadáver en tan sólo diez días

Aparece otro calderón tropical muerto en las costas de Lanzarote

Otro calderón tropical ha aparecido muerto este lunes, día 1 de julio, en costa Mejía, cerca del pueblo de Caleta de Caballo, en el municipio de Teguise. El cadáver se encuentra en un gran ...

2 de julio de 2013 (11:46 CET)
Aparece otro calderón tropical muerto en las costas de Lanzarote
Aparece otro calderón tropical muerto en las costas de Lanzarote

Otro calderón tropical ha aparecido muerto este lunes, día 1 de julio, en costa Mejía, cerca del pueblo de Caleta de Caballo, en el municipio de Teguise. El cadáver se encuentra en un gran estado de descomposición, según ha explicado el experto en cetáceos Vidal Martín. En los últimos diez días, se han encontrado seis cadáveres de estos animales en las costas de Lanzarote y La Graciosa.

El último ha sido este calderón tropical, un macho adulto de cuatro metros de longitud, en Caleta de Caballo. "Nos avisaron y hoy (por este martes) a las 16.00 horas le haremos la necropsia. Tenemos que esperar a que baje la marea porque el animal está en una zona de difícil acceso", ha explicado. El calderón tropical lleva "varias semanas muerto" y tiene mordeduras de tiburones.

Unos días antes, también habían encontrado otro calderón gris muerto en La Graciosa. "Falleció porque se había comido un calamar grande, de un metro, y se atragantó", ha explicado Vidal Martín.

Este experto se ha mostrado preocupado por los cadáveres de estos animales hallados en los últimos días en Lanzarote y La Graciosa y ha señalado que puede ser "que la mala mar los esté arrastrando a la costa". "En principio, los que han aparecido no tenían signos de haber muerto por alguna actividad humana, aunque su estado de descomposición dificulta el análisis de las causas de la muerte", ha explicado.

Por ello, ha enviado las pruebas también a Las Palmas para que sean analizadas en la Facultad de Veterinaria. "La cantidad de animales muertos es elevada, pero también ha pasado otras veces", ha indicado. "Todo puede ser una casualidad y que debido a la mala mar los cadáveres acaben en la costa", ha manifestado.

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