"¡Vergüenza!, ¡vergüenza!, ¡vergüenza!". Ése es uno de los gritos que se repiten a las puertas de Caty y de su hijo de 17 años, que este viernes van a ser desahuciados de su vivienda. Tras la llegada de la comisión judicial y un primer momento de diálogo con los miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), los agentes de la Policía Nacional que han acudido a ejecutar este desalojo están viviendo momentos de tensión con los manifestantes.
Decenas de personas, entre miembros de la PAH, vecinos y hasta turistas están intentado evitar esta medida y se han colocado frente al portal para impedir al paso a los agentes. Ante esta situación, los policías han intentado primero pasar por encima, y después han comenzado a sacar a varias personas en volandas.
"¡Díos mío! ¡Díos mío! ¿Cómo puede estar pasando esto?, grita Caty desde la ventana de su casa.
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