Su vida cambió radicalmente el pasado 4 de septiembre de 2008. David Domínguez circulaba con su motocicleta por la Rambla Medular de Arrecife, cuando tuvo una colisión contra un turismo. Este hombre resultó gravemente herido en el accidente, estuvo un año ingresado en el hospital, tuvo que superar 17 operaciones y perdió la pierna derecha. Ahora volverá a reclamar en un juicio más de 1,1 millones de euros de indemnización a la empresa aseguradora, después de que una sentencia fijara esta cantidad en algo más de 69.000 euros. Pero para ello necesita testigos del accidente, porque considera que él no tuvo la culpa del mismo, pese a que otra sentencia absolvió a la conductora del turismo.
"Lo único que quiero es poder encontrar a un chico. Dentro de mi medio inconsciencia cuando tuve el accidente, escuché cómo un chico dijo que vio todo junto a una pareja que también estaba allí. Fue él quien avisó a la novia que tenía en aquel momento", señala David Domínguez a La Voz. "Estuve dos meses ingresado en el Hospital de Arrecife, donde me salvaron la vida hasta que me pudieron trasladar a Sevilla, mi ciudad natal. Ya no supe nada de las personas que pudieron ver el accidente ni del chico, que es el único que me puede ayudar a esclarecer el caso. Por favor, si alguien puede ayudarme", implora.
El accidente tuvo lugar el 4 de septiembre de 2008 sobre las 12:45 horas, a la altura de la Comisaría de la Policía Nacional en Arrecife. Como consecuencia del impacto, la motocicleta y su conductor salieron despedidos y acabaron a unos 35 metros de distancia del lugar del choque, según el atestado policial, al que ha tenido acceso La Voz. La conductora del turismo contra el que impactó la motocicleta manifestó que estaba iniciando una maniobra de adelantamiento "tras haberla indicado convenientemente y haber asegurado que la podía hacer con seguridad", cuando "de forma súbita" sintió "un impacto lateral izquierdo " y vio cómo una motocicleta salía "despedida al suelo con su conductor". Por su parte, David Domínguez no pudo declarar para el atestado, ya que se encontraba muy grave.
El agente que instruyó este atestado aseguró que el accidente "pudo ocurrir cuando el turismo circulaba por el carril derecho de la Rambla Medular e inició la maniobra de cambio de carril hacia el izquierdo para adelantar a un vehículo todoterreno sin identificar, que le antecedía". "En ese mismo instante, la motocicleta pasó por ese carril izquierdo de la vía presumiblemente a una velocidad inadecuada por exceso", concluyó.
Por el contrario, una empresa de ingeniería forense contratada por la aseguradora de David Domínguez indicó en un informe que lo que se calculaba en el atestado policial era "la velocidad post colisión de la motocicleta y no la velocidad de circulación, debido a que no hay pruebas objetivas antes del impacto". "Se afirma que la motocicleta iba a 72,26 kilómetros por hora, cuando es físicamente imposible que circulara a esa velocidad, debido a que al inicio de la recta hay una rotonda y la motocicleta dispondría solamente de un espacio muy reducido para alcanzarla. Para alcanzar dicha velocidad, el motorista tuvo que acelerar la motocicleta a magnitudes equiparables o superiores a lanzamientos de cohetes espaciales", afirma este informe, que también plantea que la conductora pudo sufrir un deslumbramiento por culpa del sol.
La Justicia le quita la razón al motorista
Sin embargo, una sentencia del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 2 de Arrecife declaró la absolución de la conductora. Posteriormente, David Domínguez denunció a a la empresa aseguradora de la compañía, a la que exigió una indemnización de 1,1 millones de euros por las lesiones causadas, pero otra sentencia del Juzgado de Primera Instancia Número 1 de Arrecife fijó esta cantidad en 69.000 euros.
David Domínguez recurrió este fallo a la Audiencia Provincial de Las Palmas, donde próximamente se celebrará un nuevo juicio. Confía en encontrar a los testigos que asegura que vieron el accidente para que así puedan declarar que "no fue mi culpa". "La chica invadió mi carril y yo me caí de la moto. He estado más de un año en el hospital, me han operado 17 veces, tengo parte del brazo izquierdo implantado y la pierna derecha amputada", lamenta este hombre.
David Domínguez considera que "hay muchas cosas oscuras" en este caso y defiende que él no iba deprisa con la motocicleta antes de tener el accidente. "Es una cosa totalmente incierta", asegura.
