Un avión de Binter que realizaba un vuelo de Turín con destino a Gran Canaria ha tenido que efectuar este martes un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Lanzarote, tras detectarse humo en la bodega de la aeronave.
"Por proximidad y por precaución, decidieron aterrizar aquí", explican desde el Consorcio de Seguridad y Emergencias de Lanzarote, que fue activado por si era necesaria su intervención.
Finalmente, no se ha requerido la actuación de los bomberos y el vuelo ha aterrizado sin más incidentes, encargándose el propio personal de Binter y del aeropuerto de controlar la situación.
Según han explicado desde la compañía, "una vez el avión ha tomado tierra con normalidad, se han realizado las preceptivas comprobaciones y se ha constatado que dicho aviso resultó ser una falsa alerta originada por un fallo en el detector de incendios".
Los sistemas y procedimientos de seguridad se han activado de la forma prevista, sin que, en ningún momento, la seguridad de los pasajeros y la tripulación se haya visto afectada por este incidente.
Por último, desde Binter informan que están atendiendo a los pasajeros y organizando la operativa para que puedan llegar a su destino final a la mayor brevedad.