Expectación en la rotonda de la Fundación César Manrique (Tahíche) estepasado viernes por la noche durante el quinto día de rodaje de Los Abrazos Rotos, última película de Pedro Almodóvar. Después de más de tres horas de pruebas y ensayos, el opel corsa rojo en el que supuestamente viajan los personajes de Penélope Cruz y Lluís Homar, avanzaba por control remoto alrededor del juguete de viento diseñado por el artista lanzaroteño. Un centenar de personas, además de las cuarenta que forman el equipo de rodaje, contenían la respiración ante la que iba a ser una de "las escenas esenciales" de la película, tal y como señaló el propio director manchego.
El vehículo estaba ocupado por muñecos de goma que imitaban las figuras de Penélope Cruz y Lluís Homar. A apenas unos metros de distancia, los actores de carne y hueso seguían la escena con atención. Otro de las protagonistas del momento, aunque detrás de las cámaras, era Reyes Abades, el mago de los efectos especiales en España. Se rodaba con sonido directo y el impacto del todo terreno con el coche rojo de los protagonistas era decisivo a la hora de dar por válida la toma.
El escenario de este accidente simulado ha sido el mismo en el que hace más de quince años, falleció César Manrique. Tal y como afirmó Pedro Almodóvar, la elección fue "casual" ya que aunque el cineasta conocía la historia de Manrique y sabía que había muerto en las carreteras lanzaroteñas, no sabía que había sido en este mismo punto. "Elegimos esta rotonda por el móvil de viento y por su situación", especificó Pedro Almodóvar.
El próximo lunes, la actriz Blanca Portillo aterrizará en la isla de los volcanes para rodar en la playa de Famara. Allí, un grupo de extras lanzaroteños, entre ellos cinco niños volando cometas, se unirán al rodaje.
Ana Mª Lázaro / ACN Press
