"Sueño desde hace tiempo con abrir un restaurante típico canario". Así se manifiesta Luna Zacharias, la concursante lanzaroteña de MasterChef, que afirma que formar parte de la octava edición del programa está siendo una experiencia "increíble y mágica".
"Es algo que lo estoy disfrutando muchísimo, como si fuera un caramelo, y saboreándolo lentamente porque sé que en algún momento se va a acabar", señala la conejera, que reconoce que llegar a la final va a ser "muy complicado". "Voy a disfrutar del camino hasta donde tenga que llegar", apunta.
En una entrevista que ha ofrecido a La Voz de Lanzarote, Luna Zacharias revela cuál es su plato estrella, cuáles son sus rincones favoritos de Lanzarote y cómo está viviendo actualmente el confinamiento por la pandemia de coronavirus, que incluso obligó a parar la grabación del programa, cuando faltaba por rodar la final.
"Cuando se nos permita grabar reanudaremos las grabaciones con normalidad siguiendo, por supuesto, todas las recomendaciones de las autoridades sanitarias", han indicado al respecto desde la productora.
- ¿Por qué decidiste presentarte al casting para convertirte en concursante de MasterChef 8?
- No me dio tiempo ni a pensármelo. Fue de un momento a otro. Estaba con en Lanzarote grabando un proyecto, del que todavía no puedo contar nada. Estaba allí grabando cuando mi madre tuvo que irse a Almería para visitar a mi abuela, que estaba mala. Yo me quedé con mi padre y, para tranquilizar a mi madre, le grababa vídeos de lo que cocinaba a mi padre. Un día mis tías me empezaron a animar para presentarme. Me metí en la web del casting por hacer la gracia y mandar a mis tías por whatsapp una captura. Justo el casting estaba abierto y, a lo loco, me inscribí. En ningún momento imaginé que contactarían conmigo. Una cosa llevo a la otra y, de repente? estoy aquí. No lo llevaba meditado. Nunca fui seguidora del programa, está mal decirlo. Lo había visto de pasada, especialmente MasterChef Junior, que le gustaba mucho a mi madre. Pero ya está, no sabía nada más.
- ¿Cómo surgió tu pasión por la cocina y qué otros hobbies tienes aparte de cocinar?
- Mi pasión por la cocina surgió cuando fui consciente de que somos lo que comemos. Ahí fue cuando me di cuenta del impacto positivo que tiene la alimentación en mi cuerpo. Era una forma de conectar hasta conmigo misma. Meterme en la cocina era casi una forma de meditar. La cocina sana y el yoga me ayudaron muchísimo. Cuando voy a Lanzarote me encanta cogerme la furgoneta y mi tabla de surf para escaparme a la playa con mi hermano. Juego al volleyball con él, que me encanta. En Madrid suelo irme al Retiro a hacer deporte. El yoga, que es fundamental en mi vida, y leer.
- ¿Cómo está siendo tu experiencia en el programa y qué vas a aportar al mismo?
- Mi experiencia está siendo increíble y mágica. Es algo que lo estoy disfrutando muchísimo, como si fuera un caramelo, y saboreándolo lentamente porque sé que en algún momento se va a acabar. Lo estoy gozando en todos los sentidos. La adrenalina, los nervios, la tensión, la felicidad? Este programa es como una montaña rusa y estoy disfrutando con cada sensación. Intentaré aportar coraje, ganas, pasión, esfuerzo, positividad, cariño y apoyo. Lo quiero dar todo y más.
- ¿Qué opinas de que la mayoría de los medios de comunicación hablen de un posible romance entre tú y Alberto tras la primera emisión del programa? ¿Te preocupa que eso sea lo que más ha dado que hablar de tu participación, cuando además no es lo habitual en un programa como MasterChef?
- Cuando vi a Alberto por primera vez en unos de los casting me pareció muy mono, pero ya está. Resulta que el universo me lo puso delante en la última prueba de selección y hubo feeling. Somos amigos y nos llevamos muy bien.
- En el primer programa, apostaste por un plato con sabores canarios, una hamburguesa de plátano con batata frita y queso de cabra, con el que conseguiste el delantal blanco convirtiéndose en aspirante de MasterChef 8 pero ¿cuál es tu plato estrella?
- Las viejas al horno con papas y cebolla (del campo de Lanzarote).
- ¿Te ves como ganadora de MasterChef 8?
- ¡Qué va! Este año veo muchísimo talento en las cocinas y mucho nivel entre mis compañeros. O me pongo las pilas o me las pongo. Yo voy a intentar crecer y evolucionar, porque nada me haría más ilusión que estar en la final, pero la verdad es que es muy complicado. Voy a disfrutar del camino hasta donde tenga que llegar.
- ¿Te gustaría poder abrir tu propio restaurante en un futuro?
Me encantaría, es algo con lo que sueño desde hace tiempo. Lo tengo ya pensado y espero que sea pronto. Sería algo típico canario, que me apasiona, con cocina elaborada y mucho sabor. Lo montaría en Madrid. Es mi sueño. También sueño con tener un libro. Cuando tuve mi canal de Youtube de yoga y de cocina sana, que no me veía ni Dios, me motivé con las recetas. En ese momento empecé a soñar con escribir un libro con recetas saludables y fáciles para todo el mundo, que se llamará algo así como: 'Alimentos ricos en buen humor'. Sería otro de mis sueños.
- En tu perfil de MasterChef se destaca que has hecho tus pinitos como actriz. ¿Qué trabajos has hecho en este mundo? ¿Prefieres el mundo de la interpretación, el de la cocina o te gustaría poder compaginar ambos?
- Ahora estoy enamoradísima de la cocina, me encanta. MasterChef me esta haciendo creer que este puede ser un futuro hermoso para mí. Sería feliz y eso es lo importante, que en el trabajo no mires el reloj para ver cuánto te queda para salir corriendo. Me veo montando algo, como dije, pero no cierro la puerta al mundo de la interpretación. Si aparece alguna oportunidad en el futuro para trabajar como actriz no diría que no. Estoy en esa sintonía en la que digo sí a todo. Intentaría compaginarlo.
- Actualmente vives en Madrid pero ¿sigues manteniendo relación con Lanzarote? ¿Qué es lo que más te gusta de la isla?
Sí, vivo en Madrid y amo esta ciudad locamente. Me encanta el centro y me apasiona la locura de gente en el centro, cómo se vive y la energía de la ciudad. Es verdad que hay momentos en los que necesito irme a Lanzarote. Intento ir con frecuencia porque me encanta. Es verdad que soy puro nervio y hay momentos en los que necesito la locura de Madrid. Lo que más me gusta de Lanzarote es Famara y esa carretera recta y ver el paisaje. Es una imagen que siempre tengo presente.
- Y ahora, ¿cómo estás viviendo el confinamiento y la situación actual por la pandemia de coronavirus?
Estoy bien y me está sirviendo para reencontrarme conmigo misma. Estoy cocinando mucho estos días y todas las mañanas hago yoga. La verdad es que se me está haciendo fácil, aunque hay momentos en los que soy consciente de la magnitud que tiene esta pandemia y es muy triste. Estoy deseando que el mundo sane, evolucione, crezca y que tras esto seamos más humanos. Con mi madre hemos hecho meditación para mandar luz a todo el planeta, que lo necesita en estos momentos.