El Hospital Doctor José Molina Orosa, adscrito a la Consejería de Sanidad, ha instaurado en los últimos meses la práctica de la colonoscopia virtual, una prueba mínimamente invasiva para aquellos pacientes delicados de salud o en los que se da la imposibilidad de llevar a cabo una colonoscopia convencional.
Este procedimiento, que trata de detectar posibles tumoraciones o formaciones polipoideas en el colon, se lleva a cabo mediante tomografía computarizada y recrea de forma virtual imágenes detalladas del interior del intestino grueso. Esta recreación con software permite a los especialistas observar los tres planos del espacio y hacer una valoración adecuada.
La colonoscopia virtual o colonografía se observa como alternativa a la tradicional y se reserva para pacientes con alto riesgo, en los que no es recomendable realizar el procedimiento convencional o que no pueden ser sedados, así como aquellos en que alguna anomalía en el intestino impida el uso del colonoscopio. La puesta en marcha de este servicio en el Molina Orosa evita la derivación y traslado de pacientes a los hospitales de referencia, tal y como ocurría hasta ahora.
Esta prueba diagnóstica no requiere de sedación, se trata de distender el colon y hacer un estudio con el TC, boca arriba y boca abajo del abdomen y la pelvis del paciente. Según apuntan los facultativos del servicio de radiología resulta muy efectiva para valorar pólipos a partir de 4 mm y cánceres de colon. Además, se puede, al mismo tiempo, hacer un estudio completo del abdomen y valorar la pared del intestino en su parte interna y externa.
Sin embargo, señalan, uno de los inconvenientes del procedimiento radica en la imposibilidad de tomar muestras de las lesiones visualizadas, por lo que, si se encuentran pólipos significativos, el paciente tendrá que someterse a una intervención para su eliminación.
El servicio de Diagnóstico por Imagen del Hospital Doctor José Molina Orosa que dirige la doctora Lourdes Guillén, cuenta un equipo de profesionales inmersos en un proceso de formación constante que ha permitido al hospital incorporar esta nueva técnica y otras como el uso de radiofrecuencia para tratar los nódulos benignos de tiroides, que se ha afianzado en lo último meses.
En este año marcado por la pandemia, desde el Hospital destacan el esfuerzo realizado por Radiología para el diagnóstico de la COVID-19. Entre los meses de marzo a noviembre se han realizado en el Hospital un total de 653 TAC torácicos frente a los 457 que se hicieron en el mismo periodo de 2019, lo que supone un incremento del 42,88% .
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